Una joven alejada del mundo, un Japón imperial y unos monstruos que amenazan con destruir todo a su paso. Winter’s Wish: Spirits of Edo se presenta como un otome de fantasía en el que tú, como jugadora, deberás no solo salvar el país, sino conseguir el favor de uno de los múltiples pretendientes que te ayudarán a lograr tu cometido.
Una historia visual que rezuma un aire clásico y fantástico que se mezclan con una gran cantidad de romances, cada uno único a su manera y un dibujo y diseño de personajes que dejarán sin aliento a quien se atreva a adentrarse en su mundo. Hoy hablamos de la nueva apuesta de Aksys Games.
Camelia
Primer año de la era Kyoho, 1716, una época de grandes penurias para los japoneses han provocado que, sin que nadie sepa el porqué, unos extraños seres comiencen a atacar a la sociedad. En el frío de una noche de invierno, una joven atrapada por sus propios miedos vive encerrada en una aldea alejada de la gran Edo. Y es que la muchacha guarda en su interior un gran poder. Es capaz de ver los “hilos negros” antes de que ocurra una desgracia. Su capacidad de anticipar el mal ha llevado a pensar a sus vecinos que es ella quien atrae al peligro y por ello la han apartado de toda vida en sociedad.
Lo que nadie sabe es que esos seres infernales se alimentan de los pensamientos negativos que tanto han acercado a los japoneses y ella, en realidad, es capaz de ver las emociones de las personas. Si una persona está feliz, el hilo que le rodee será de un tono amarillo alegre, si muestra cariño será el rosa más dulce el que le teñirá. Y así, con todos los demás colores y emociones. Una paleta de tonos de lo más llamativa que destaca en el blanco puro de la nieve.
Pero, lo más llamativo no son solo los monstruos o el hecho de poder ver las emociones como si del rojo hilo del destino se tratase. Y es que, además de humanos y seres amenazantes, existen un tipo de ¿criaturas? “No humanas”, estos seres, los Formfolk (al ser un juego en inglés, se traduciría algo así como las criaturas folclóricas, pero queda tremendamente mal al castellanizar). Estos seres nacen del amor que la gente les ofrece a herramientas (como ocurre en Noragami, para que os hagáis una idea).
Sí, puede ser que el planteamiento sea un tanto complicado, al menos, a la hora de leerlo, pero en lo que al juego respecta, todo fluye de manera muy natural. Y es que, sin duda, un elemento que me parece muy acertado es el hecho de que, a diferencia de otros juegos de este estilo, las rutas comunes son mucho más extensas. De este modo se permite poder expandir al máximo el universo creando una historia con una base muy marcada que sabe perfectamente qué es lo que busca.
Crisantemo
Esto es un otome con todas las letras, lo que implica, como no podría ser de otra manera, diferentes rutas con diferentes personajes. Como anteriormente mencioné, existen diferentes “rutas comunes” ¿Qué significa esto?
Winter’s Wish cuenta con seis pretendientes diferentes, cada uno de ellos divididos por parejas. Así nos encontramos con tres rutas comunes. Cuando la jugadora comienza su partida, lo primero que deberá de hacer, tras un capítulo de presentación, será elegir uno de estos tres caminos. Completados los capítulos 2 y 3 ya se podrá jugar con el interés romántico. Así puestas, estas tres primeras opciones son:
- Castle Town: donde se encuentran Genjuro y Yoichi
- Entertainment District: para Kinji y Ohtaro
- Samurai Town: para Tomonari y Kunitaka
Antes de comenzar a hablar de cada uno de los personajes, es importante destacar que, si bien no existen rutas bloqueadas hasta completar todas las anteriores (cosa que sí que pasa en juegos como Amnesia) lo cierto es que son necesarios algunos requisitos para poder llegar a los buenos finales. Así pues, por jugar, se pueden jugar, pero te verás de bruces contra un final malo si no has logrado antes obtener toda la información. Es por ello que aunque no exista como tal una ruta para elegir los personajes, sí que es mejor primero completar la “Samurai Town” dejando el “Entretainment District” para el final.
Una vez explicado esto, comencemos:
Samurai Town
Tomonari Takamura doblado por Yusuke Kobayashi
El primero de los personajes a los que la protagonista conoce. De hecho, es quien la ayuda a salir de su “hogar”. Takamura es ese primer personaje que aparece que te hace quererle solo con verle. Con un aura tierna, una personalidad gentil, sencilla y dulce. Es un trozo de pan y aunque se aleja de todos y marca cierta distancia contigo, lo cierto es que haría todo lo posible para que estés feliz y agusto en tu nueva vida.
Vale, aquí os seré lo más sincera posible. Le quiero con locura. Es que es un bebé, pero bebé de verdad y aquí una no puede ser objetiva (con el resto de los demás sí, pero entendedme, este tipo de personajes son mis favoritos). Takamura es como un animal pequeñito, un conejito, de los que quieren darte un montón de amor pero al mismo tiempo no pueden llegar a confiar del todo. Y que al fin y al cabo es la imagen del juego por algo.
Es una ruta lenta, sí, y él es un poquito bastante sobreprotector (además, su ruta es la más difícil, por los requisitos) pero al mismo tiempo es perfecta. Es super mono y creedme que su final bueno es algo que no os imagináis.
Kunitaka Tojo, doblado por Maeno Tomoaki
A Kunitaka le conocerás desde el primer capítulo, y es que él es uno de los personajes que, junto a Tomonari, escoltan a Suzuno (el nombre de base de la jugadora) a Edo desde su pueblo natal. En pocas palabras, se comporta como el “hermano mayor” de manual. Es atento, simpático, te ayuda con todo y es extremadamente comprensivo y cariñoso con los niños, y contigo.
De las rutas, esta es una de las más divertidas. Kunitaka es un himbo, no tiene maldad ninguna. Y aunque su ruta es muy dulce, lo cierto es que a nivel personal (y a partir de aquí lo será) esta ruta se me hace un tanto ¿forzada? Sin entrar en detalles, lo cierto es que Tojo me ofrece ese personaje amistoso, con el que podría ser muy buena amiga, que te cuida y te quiere, pero a nivel romántico, no mucho la verdad. Igualmente, es una ruta muy disfrutable.
Castle Town
Genjuro Kuga doblado por Takuya Satou
Serio, consciente de su trabajo y un tanto frío. Así es Kuga uno de los Oniwaban encargados de patrullar por el distrito de Castle Town. De todos los personajes del juego, él, sin duda, es el que más empeño le pone a su función. De hecho, de todas las rutas esta es la que más acción (en el sentido de peleas, no os vayáis a creer) tiene.
Al principio todo es super complicado, y es que a una persona tan diligente como Genjuro, el romance es algo que se le va de las manos. Aún así, como buen kuudere tiene escenas que no dejan de demostrar que no es tan estoico como una podría pensarse.
Yoichi doblado por Seichiro Yamashita
Yoichi es, en pocas palabras, un típico personaje que trata con condescendencia en todo momento a la protagonista. Es de los que que se creen mejores que el resto, dice lo que piensa sin filtro y es un tanto duro (bueno, es muy duro, aquí el amigo no se corta un pelo).
A ser sincera, al comienzo este personaje me caía mal, pero mal mal. Es un borde de cuidado, le importa más comer que otra cosa, y si tiene que anteponer cualquier misión a hacerte un mínimo de caso, creeme que al principio lo hará. Pero, ¿qué deciros? El topo de enemies to lovers es una cosa que existe y que me encanta. Lo de ¿los que se quieren se pelean? pues esa es esta ruta.
La verdad es que, de todas, esta es una de las que más me han gustado. Yoichi tiene momentazos y ver cómo se va creando la química ante tu personaje y él es superentretenido. Ahora bien, cuidado con las rutas malas, porque a ser sincera caer en su bad ending (o sorrow, ‘pesar’ en castellano, como así lo llaman en el juego) es mucho más fácil de lo que os podéis creer, un paso en falso y se acabó.
Entertainment District
Kinji doblado por Seichiro Yamashita
Kinji es un actor de kabuki, a ser más específicos, un onnagata (hombre que representa papeles femenino). De hecho, en su campo es uno de los mejores, de ahí su fama y el tiempo que lleva actuando. Es un tipo serio, pero que sabe sorprenderte en los mejores momentos, en este sentido es de los que más balanceados está.
Un detalle muy interesante es que, al ser actor, cuenta con varios personajes secundarios al nivel que el propio actor. Muy al contrario de lo que podría imaginarse, es extremadamente carismático y cariñoso. De hecho, su ruta buena es toda una oda al amor. De él no diré más, porque sinceramente es un poco “sé perfectamente lo que va a pasar y aún así me va a encantar”.
Ohtaro doblado por Soma Saito
Si con Tojo hablamos del típico personaje “hermano mayor”, con Ohtaro sería el “hermano pequeño”. De entre todos, es sin duda el más sociable. Es muy fácil hablar con él, es tierno y adorable en todos los sentidos. Y, desde el principio, muestra interés por conocer al máximo a la protagonista.
Su ruta, eso sí, es difícil con ganas. Sí es muy majo, pero la facilidad que tiene para pasar de ti si no les interesas es sorprendente. Ahora, si lo consigues, es encantador. Es un romance un poco conceptual, porque pasa de no decirte nada más que lo mucho que te quiere a sorprenderte con una parte de su pasado que te deja sin palabras. Pero, si os digo la verdad, esta ha sido mi segunda ruta favorita. Merece mucho la pena tener que luchar por que te acepte como interés romántico y no como amiga.
Suzuno, la protagonista
Como ocurre en la amplia mayoría de otomes, no tiene una actriz de voz. Suzuno (a quien puedes cambiarle el nombre por el tuyo propio), es la última descendiente del clan Hakuseki y, por ende, tiene el poder de ver los “hilos de las emociones” invisibles al resto. A nivel de personaje, es encantadora (o eres más bien). Tiene una personalidad que, si bien puedes ir marcando tú a tu gusto, está claramente formada. No es, ni de lejos, la típica protagonista que se deje manejar.
En todas las rutas es lanzada, te deja formar parte activa del juego, sabe cómo pelear, defenderse y defender a los suyos. Dependiendo de la ruta principal (de las tres a elegir) su personalidad cambiará, desde una más peleona o una capaz de controlar el espionaje o de llamar la atención si así lo requiere.
Sabe usar sus habilidades y tiene las suyas propias, como el “snow sacrament” (el sacramento de la nieve sería en castellano) que le permite poder enfrentarse a los monstruos que persiguen a los habitantes de Edo. En general, un muy buen MC con un gran desarrollo de personaje que sabe lo que quiere y cómo lo quiere (más o menos). Además es super dulce, te hace quererla incluso si eres tú quien la maneja.
Ciclamen
Hablemos de jugabilidad. Como suele ocurrir en los otomes, solo cuenta con textos en inglés y voces en japonés. El juego se estrenó, para Nintendo Switch, el 18 de mayo de 2023, tanto la versión digital como la física y la deluxe. En esta reseña, el formato usado ha sido el digital.
En cuanto la calificación por edades, se considera T, y, por tanto, para adolescentes, por lo que en este sentido no hay ningún problema de restricción. Por otra parte, en lo relacionado con la compatibilidad, el juego está disponible para Switch en sus tres modos (portátil, mando y televisión) y es compatible con el mando Pro. Es un juego individual y offline, por lo que no necesitará de internet para poder jugarse.
A nivel de longitud, no sabría establecer unas horas concretas. Diría, por lo complejo que puede llegar a hacerse, que una media de 10 horas por ruta, aunque, como suele pasar en este tipo de obras, puede extenderse o alejarse dependiendo de si consigue una ruta u otra. Y es que, si una cosa tengo clara es que este juego ha sido uno de los más densos, pero no en el sentido de pesado, si no en el de contenido.
Sobre el sistema de juego, la verdad es que la interfaz es una delicia. La mezcla del estilo clásico y del invierno es muy bonita y limpia. De hecho, tiene dos temas principales, tanto el de invierno, en azul, como el de primavera, en un tono rosa. Una vez ya dentro del menú, se divide por diferentes secciones que aparecerán al completar el juego.
De este modo, en la pestaña de ajustes se puede configurar desde la velocidad de los textos, su tamaño, el volumen del juego, o el de cada una de las voces. De hecho, por personalizar, es hasta posible cambiar los controles, todo para que sea más sencillo jugar. En este sentido, es perfecto.
Por otro lado, en «exhibits» se presenta un menú con forma de caja con diferentes apartados. En cada uno de ellos se encuentran el diccionario, la galería, los vídeos, la música y los extras. Un detalle super adorable es que, según el espacio que selecciones, aparecerá un dibujo chibi de los personajes diciendo «yep». Un detalle muy mono.
Begonia
Es ahora el turno del aspecto visual. Porque al fin y al cabo es una visual novel por algo. El arte se divide en dos secciones. Por un lado tenemos a Team Nagaoka, como la persona encargada no solo del dibujo, sino que también del diseño de personajes y, por otro, a Yuuya como la encargada de hacer los chibis.
Ambas artistas son más que conocidas en el mundo del manga. La primera de ellas por su trabajo en obras como Becoming a God with you y la segunda de ellas destaca por obras como Cupid Parasite. Así pues, cuando dos pesos pesados del mundo de los otomes se unen, no es raro que se cree un arte más que espléndido.
El diseño de personajes es una locura, tanto por el detallismo de sus trajes como por la hermosura de sus rostros. Juega perfectamente con el balance de los diseños de época y la fantasía para crear estilos que casan perfectamente con las personalidades de cada uno de sus portadores. En este aspecto, un 11/10. De hecho del mismo modo, los fondos, mucho más realistas en este sentido, también se presentan de una manera muy bien estructurada. Simples, pero no vacíos.
Un detalle que gusta mucho en este sentido del juego es que, conforme vas completando ciertas partes de las rutas, puedes ir obteniendo nuevas ilustraciones. Estas, junto a los vídeos de los opening y ending de cada ruta, están disponibles en la galería. Completar todas las rutas al completo merece la pena solo por ellas. Todas ellas se recopilan en el apartado de la galería, así como en movies para los vídeos.
Por otro lado, se presenta la música. La banda sonora es una delicia. Dulce, delicada y que casa perfectamente con lo que la obra busca transmitir. Sabe cómo hacer para dar aún más peso a las palabras de sus personajes. De hecho el opening, Yure Yurare de manami, quien también hace el ending, es el perfecto ejemplo. Una pena que no exista, aún, la versión extendida.
Narciso
A nivel general, me ha gustado muchísimo Winter’s Wish: Spirits of Endo. De hecho, al comienzo lo pasé especialmente mal porque no sabía con quien quedarme de todos los personajes. Y es que, si bien hay algunos que eran un “no” de manual para mi, otros me moria por conocerlos. A nivel personal, y creo que esto sí que se ha notado, las rutas con las que mejor lo he pasado han sido las del Entertainment District, en especial con Ohtaro.
Pero, antes de seguir hablando, he de aclarar una cosa que, aunque podría ser un pequeño spoiler quizás es bueno saber para poder llegar a entenderlo todo mejor. En este otome no se puede esperar un amor “fogoso” de una gran cantidad de besos y descontrol. En la mayoría de los casos, unos más que otros, se busca un romance más bien platónico. No por ello malo, pero es un detalle importante a tener en cuenta.
Superada la aclaración. Una obra bastante buena, con personajes muy interesantes y una gran cantidad de posibilidades. En ocasiones la historia puede patinar levemente y algunas rutas no son especialmente fáciles, pero más allá de detalles que no llegan a molestar en especial una vez dentro de la obra, lo cierto es que es muy disfrutona.
Lo mejor
- Un juego bastante largo.
- Muy buenos personajes.
Lo peor
- No está en castellano.
Winter’s Wish: Spirits of Edo
Plataforma/s: Nintendo Switch
Desarrollo: Idea Factory
Jugadores: 1 offline
Audio/Textos: Japonés / Inglés
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