Corría el año 1998 cuando sobre las 5 de la tarde estrenaron por primera vez La familia crece en el segundo canal de televisión española, más conocido como La 2.
Aquellas aficionadas al manga y anime (que por entonces se contaban con los dedos de una mano) no pudieron dejar de sorprenderse, «¡al fin un shojo en televisión en un horario razonable!». Desde la dorada época del anime en Tele 5 no se había vuelto a ver cosa igual.
Y he aquí que la serie creó legión. Los mismos directivos de la modesta cadena no podían estar más sorprendidos, a la vez que en revistas del mundillo se alababa a la obra y se le dedicaban especiales (el primer número de la Minami contenía grandes artículos al respecto), los medios más generalistas mostraban una posición indignada, llegando a verter comentarios como que las estilizadas figuras de los protagonistas podían promover la anorexia entre los adolescentes.
Sea como fuera Marmalade Boy aterrizó en España en un momento en el que el anime en televisión estaba prácticamente extinto, y su edición en papel agonizaba tras la cancelación de varias famosísimas series como Gumm, Ranma 1/2, Ah! Mi Diosa, 3×3 Ojos, y un largo etc.
Las madres veían aquel culebrón animado con sus hijas, no había otro tema mejor que tratar con los amigos en clase y cada nuevo capítulo creaba expectación. Era la llegada del fenómeno shôjo a nuestras fronteras.
Planeta DeAgostini lo tuvo claro, rápidamente adquirió los derechos del manga y lo editó en castellano, logrando de nuevo una gran acogida, y siendo esta obra una de las bases para futuras publicaciones.
Wataru vendía, y de que manera. El anime que nos llegó en gran medida censurado, faltando openings y ending, así como mostrando solo la parte musical y no la cantada de la canción, fue más que suficiente para convencer a todos los aficionados al manga y al anime.
Después de Marmalade Boy todo cambió, las chicas comenzaron a tomar los salones, las publicaciones dirigidas al público femenino subieron como la espuma en muchas ocasiones llegando a sobre saturar el escaso nicho de mercado. Títulos y más títulos en nuestras estanterías, pasamos de conformarnos con shônen a descubrir todo un mundo de pasiones y corazones alborotados.
Comenzaron a llegar más mangas de Wataru Yoshizumi, Somos chicos de menta (Minna Bokura), más tarde llegó Solamente Tú (Kimishika Iranai) y otras obras menores como Quartet Game, Random Walk.
Más recientemente se han publicado otros de sus mangas como son Ultra Maniacs, Porque me gustas y Cherish.
Wataru Yoshizumi es una mangaka de 47 años nacida en Tokyo.
Hizo su debut en la revista Ribbon donde ha publicado la totalidad de sus trabajos hasta el momento con un manga llamado Radical Romance.
La visita de Wataru Yoshizumi al XVI Salón del Manga de Barcelona puede que a muchos no les diga nada, puede que a esta nueva generación de otakus formados por Naruto y Bleach ni siquiera les importe, pero es, de hecho, algo prácticamente histórico para el mundo del manga y el anime en nuestro país.
A esta autora hay que agradecerle muchas cosas, pues fue por ella en gran parte por lo que actualmente contamos con este tipo de mercado en España.
También es cierto que llega tarde, Wataru hubiese sido recibida a bombo y platillo 8 años ha, sin embargo llega ahora, cuando son escasos los aficionados que aún la recuerdan por La familia crece.
Sea como fuere, Wataru Yoshizumi es una invitada de lujo y su sesión de firmas una cita ineludible para todos aquellos que han disfrutado con sus magníficas obras.
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