En esta ocasión os traemos las impresiones del vigesimosegundo episodio de la segunda temporada de My Hero Academia, titulado “Yaoyorozu asciende”. Como siempre recordamos que esta review puede contener spoilers, así que se recomienda no seguir leyendo antes de ver el episodio.
El examen práctico continúa y esta vez es el turno de Tokoyami y Asui que se enfrentarán a Ectoplasm, un profesor que posee la habilidad de hacer hasta 30 clones y manipularlos a voluntad. Aunque son fáciles de vencer, Tokoyami tiene dificultades en el combate cuerpo a cuerpo, por lo que la compenetración con su compañera Asui será vital para obtener un desenlace favorable.
Ectoplasm consigue poner a los dos estudiantes contra las cuerdas, pero Asui idea una ingeniosa estrategia para hacerle frente. Mientras Dark Shadow entretiene al profesor, Asui regurgita las esposas que previamente se había tragado y se las entrega a la sombra de Tokoyami, quien aprovecha el descuido del profesor para capturarle con las esposas.
Mientras tanto, Iida y Ojiro se enfrentan a Power Loader en un terreno cuya orografía es completamente favorable al profesor, capaz de moverse bajo tierra a gran velocidad con su singularidad. Nuevamente, la cooperación entre los dos alumnos consigue una espectacular victoria para los jóvenes.
El momento estrella del episodio llega con el cuarto combate, que enfrenta a Aizawa contra Todoroki y Yaoyorozu. Ambos estudiantes entraron a la academia por recomendación, algo que indica que los dos son excelentes candidatos para ser héroes. Sin embargo, Yaoyorozu, quien entró pisando fuerte en la primera y segunda temporada, ha sido ninguneada en muchas ocasiones, hasta el punto de perder toda la confianza en sí misma. Esta tendencia, que se ha acentuado hasta el punto de convertir a Yaoyorozu en un simple personaje relleno, por suerte termina hoy.
Al principio del combate, Yao se dedica a seguir las órdenes de Todoroki, ya que cree que es muy superior a ella en términos de razonamiento. Sin embargo, al ser una simple seguidora y no trabajar en equipo, el joven Todoroki no tarda en caer ante las habilidades del profesor Aizawa. Perdida y sin saber qué hacer, intenta huir desesperadamente en busca de la salida, pero no tarda en ser encontrada y se ve obligada a volver.
Tras verse acorralada, finalmente Yaoyorozu saca todo su ingenio y lleva a cabo su plan maestro. Mientras trata de liberar a Todoroki, la joven ciega a Aizawa y le pide a su compañero que la siga fuera del rango de visión del profesor. Aprovechando el parpadeo del profesor, Todoroki erige una enorme columna de hielo, comprando así algo de tiempo para que Yaoyorozu prepare su estrategia. Gracias a la cooperación entre ambos, pero especialmente a la habilidad de la joven heroína, consiguen derrotar al enemigo en el último momento.
No es la primera vez que My Hero Academia otorga protagonismo a uno de sus personajes femeninos. Lo vimos durante el festival deportivo con Uraraka y en las prácticas profesionales con Asui, pero esta vez el mensaje implícito es diferente. Además de mostrar la evolución de Yaoyorozu como personaje, el episodio hace hincapié en la importancia de mantener siempre la confianza en uno mismo y la capacidad de tomar decisiones sin necesidad de depender de nadie. Este tipo de mensajes, característicos del género shounen, envían un mensaje muy positivo a los espectadores y proporcionan un trasfondo más profundo y adulto al anime.
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