Ya están aquí las impresiones de Dragon Ball Super con el capítulo 116, titulado “¡Señal de un cambio de tornas! ¡Explosión de la doctrina egoísta!”, que se emitió el pasado 19 de noviembre de 2017. Se recuerda a los lectores que en esta review se desvelan elementos del argumento del capítulo, por lo que si eres curioso o bien quieres comparar opiniones te animamos a seguir leyendo.
Gokuh en su modo Ultra Instinto está rebosante de poder. Wish razona que el ki de Kefla es similar al de la Genkidama, lo que provocó esta transformación en su rival. Kefla se transforma en súper saiyan 2 liberando todo lo que le queda de poder, sorprendiendo a propios y extraños.
El combate entre ambos se reanuda, pero Kefla no consigue asestar ningún golpe a su rival, que logra esquivar todos y cada uno de los envites con suma agilidad.
Vegeta, que detiene su pelea momentáneamente para contemplar el combate, cae en la cuenta del secreto de la doctrina egoísta. Y es que cuando ambos entrenaban con Wish, el ángel ya les comentó que el secreto para tener la fuerza suficiente para vencer a Bills, era el de no perder tiempo en transmitir la orden del cerebro a los miembros para que se muevan, si no el luchar cada miembro por puro instinto.
Gokuh le propina un puñetazo a Kefla, pero aparentemente no tiene la potencia que se le asumiría al saiyan por la cantidad de lo que desprende. El saiyan responde que está empezando a comprender cómo dominar la doctrina egoísta. Es en este momento en el que Jiren interrumpe su meditación para concentrarse en el combate.
La pelea se desarrolla con la ventaja de Gokuh, pero aún le falta esa potencia en sus ataques que permitan derrotar a su rival. Por su parte, Kefla derrocha vitalidad y energía y no cae fácilmente. El próximo ataque está claro que coronará a un vencedor.
Kefla acumula una gigantesca cantidad de ki, que incluso sale despedido de su cuerpo en multitud de direcciones actuando como un láser. Gokuh se va aproximando a su rival esquivando todos los rayos de energía que despide Kefla, al mismo tiempo que se prepara un Kame Hame Ha en una espectacular escena a toda velocidad. Kefla lanza finalmente su ataque final a Gokuh, pero este lo esquiva en el último momento, derrapando sobre el haz de energía hasta quedarse cara a cara con su rival y propinarle su Kame Hame Ha a bocajarro, derrotando a su rival y expulsándola finalmente de la pista.
Los pendientes Potala se rompen y las saiyans vuelven a ser dos en las gradas, dejando al universo 6 con solo dos luchadores. Gokuh, agotado tras el combate, vuelve a su estado original cayendo completamente agotado.
Termina el que ha sido el mejor y más largo combate del torneo, dejándonos unas escenas espectaculares para el recuerdo. La animación es de 10, y el leit motiv de Gokuh Ultra instinto es genial. Sin duda alguna, de los mejores episodios de Dragon Ball Super hasta la fecha.
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