Review de Fate/Apocrypha 23: «Al otro lado»

El pasado 16 de diciembre tuvo lugar la emisión del episodio 23 de Fate/Apocrypha titulado: Al otro lado. Como siempre, os recordamos que esta entrada contiene detalles sobre la trama de la serie, por lo que recomendamos no seguir leyendo si no habéis visto el episodio.

Mordred y Sisigou se encuentran dentro del castillo de Babilonia para intentar llegar hasta el Santo Grial. Por el camino deben pasar por la sala del trono, lugar en el que se encuentran con Semíramis, la cual libera un humo venenoso con el fin de acabar con sus oponentes. Mordred consigue sacar de la sala a su Master propinándole un empujón y quedando ella encerrada en el interior. Con el fin de que Mordred no resulte envenenada, el mago utiliza su Reji para sacarla de allí pero fracasa en el intento debido a que Semíramis consigue anularlo.

A pesar de quedar debilitada por el veneno, Mordred aguanta como puede y decide atacar a su adversario para acabar con su vida. Sin embargo, esta consigue aguantar la embestida de su rival atrapándola con unas cadenas negras. Es entonces cuando Semíramis explica a Mordred que su Hogu consigue que todo lo que haya alrededor se convierta en veneno. Saber se ve afectada por esto y Semíramis aprovecha la situación para intentar que se una a ella y asesine a su Master.

En ese momento, Mordred llega a la conclusión de que su verdadero deseo no era ser rey, sino que lo que realmente quería era estar al lado de su padre. Estando ya más calmada consigue ponerse en contacto con Sisigou y ambos realizan un ataque conjunto sobre Semíramis, la cual utiliza una bestia gigante con forma de serpiente para defenderse. Mordred atraviesa sin problemas a la criatura gracias a su gran poder y llega hasta Assassin consiguiendo terminar con su vida.

Cuando Mordred regresa al lado de Sisigou descubre que este ha resultado herido durante el ataque y se encuentra en los últimos momentos de su vida. A pesar de que este le ofrece a Mordred que se vaya al lado de los Yggdmillennia, ella le responde que no la importaba morir allí por lo que, tras una pequeña y muy emotiva despedida, ambos desaparecen.

Mientras tanto, Ruler se encuentra con Shakespeare, el único de los Servants de Kotomine que continúa con vida. Este decide utilizar su Hogu, mediante el cual mete a Juana de Arco en una ilusión basada en sus recuerdos. Esta, gracias a sus fuertes convicciones, consigue no caer en la trampa de su rival y no se dejar llevar por sus sentimientos. El problema llega cuando en el recuerdo de su muerte, Shakespeare cambia a Ruler por Sieg al pie de la hoguera.

Juana de Arco recrimina a su rival que ponga al homúnculo en esa situación cuando debería ser ella la que estuviera allí. Sin embargo, Shakespeare responde que está basado en sus recuerdos, por lo que es ella la que ve a Sieg de tal manera. Acto seguido, aparecen en un castillo donde aparece Jirgen diciendo ser un Servant. Este lleva la cabeza de Sieg en sus manos e intenta hacer ver a Juana de Arco que si ella se hace responsable de la muerte de todos los que la siguieron en la batalla, también debería hacerlo con el homúnculo.

El episodio de esta semana ha conseguido emocionarnos a través de la relación de Mordred con Sisigou. Ambos han llegado juntos a la conclusión de que sus metas estaban equivocadas. Es una pena que sus andanzas hayan llegado hasta aquí, ya que eran dos de los personajes más interesantes de la serie. Por otro lado, Juana de Arco está a punto de llegar hasta su objetivo, pero habrá que ver cómo consigue salir del hechizo de Caster. ¿Será Sieg quien la salve?. Ya apenas quedan Servants en la serie, algo que es lógico puesto que nos acercamos a su final, el cual parece que será bastante emocionante.