Tras la polémica de las filtraciones de algunos episodios, Selecta Visión traslada su simulcast a los lunes a las 19:40 horas, en vez del domingo. No obstante, para este quinto episodio hemos tenido que esperar unos días más de lo previsto, aunque ya puede verse en su página web.
Más allá de estos cambios, Ataque a los titanes sorprende a muchos esta semana con un episodio frenético, especialmente para aquellos que solo siguen al anime. En cambio, los lectores del manga habrán quedado más que satisfechos con la adaptación que Wit Studio ha realizado de otros dos de los momentos más esperados por el fandom, tras el de la semana pasada. Pero, como siempre, antes de continuar con esta review, os recordamos que las siguientes líneas contienen spoilers de la trama del episodio.
Esta nueva entrega de Ataque a los titanes empieza justo donde acabó el episodio anterior. Erwin Smith, liderando a los pocos soldados que quedan en pie, es el primero en caer al impactar sobre él una de las rocas que el Titán Bestia lanza contra ellos. Aún así, a pesar del terror de saberse muertos, los soldados continúan avanzando para poder darle a Levi la oportunidad de derrotarlo a cambio de sus vidas.
Este acto heroico de las tropas hace de señuelo perfecto. Levi, usando la fila de titanes, llega hasta el Titán Bestia. En tan solo un minuto de secuencia, Arifumi Imai nos regala una de las escenas más épicas de Ataque a los titanes. La velocidad a la que “la cámara” acompaña a Levi traslada al espectador la velocidad y la habilidad extraordinaria con la que el capitán se mueve por los recovecos del cuerpo del Titán Bestia, cortándole en lugares estratégicos para culminar con dos incisiones rápidas en su nuca, exponiendo al usuario. Ésta no es la primera vez que Imai ofrece una escena de un nivel técnico tan alto y con una animación tan fluida. Escenas como ésta, cuya ejecución es sobresaliente, marcan la diferencia en muchas producciones y, por eso, Ataque a los titanes funciona.
Tras capturarlo, Levi decide mantener a Zeke con vida. Poseer una inyección del suero que puede transformar a un humano en titán podría salvar la vida de alguien. Y esa decisión tendrá importantes consecuencias. De entre el vapor del Titán Bestia desvaneciéndose surge el titán que se desplaza a cuatro patas, que se lleva a Zeke. En la expresión de Levi puede leerse perfectamente la desesperación del que ve que el sacrificio de sus compañeros y su comandante ha sido en vano. Pero, ante todo, no ha cumplido la promesa que le hizo a Erwin. Y, en este sentido, Hiroshi Kamiya brilla dando voz a Levi.
No muy lejos de donde Levi se encuentra, de entre todos los cadáveres de los soldados, uno de ellos se levanta. Es un superviviente. Éste se cuestiona por qué de entre todos ellos ha tenido que sobrevivir él y, algo aturdido, busca entre los cuerpos de sus compañeros alguien que haya podido correr la misma suerte que él.
Al otro lado del muro, Armin, que ha tenido tiempo para pensar, se percata de que transformarse en titán supone un enorme gasto de energía. El Titán Colosal, al ser mucho más grande, implica un esfuerzo mayor para mantener su forma y, tras varios minutos transcurridos, ha comenzado a perder volumen. Finalmente, Armin, cuyas inseguridades parecían haberle dominado por completo, tiene un plan. Él y Eren se encargarán de Bertholdt; el resto se ocupará de Reiner.
Jean y Mikasa, principalmente, se echan la responsabilidad de derrotar a Reiner a la espalda. Mientras que Mikasa actúa deteniéndolo, Jean idea rápidamente un plan con la que poder derrotarlo. El chico vuelve a asumir el liderazgo y dirige a sus compañeros contra el Titán Acorazado. Mientras él hace de distracción para Reiner, Connie y Sasha deberán clavarle una lanza trueno a los lados de su mandíbula para que, cuando ésta se abra, Mikasa entre en acción y le introduzca otra por la garganta. Sin embargo, su inexperiencia les juega una mala pasada y Sasha es herida, fallando en su ataque contra Reiner.
Pero, como suele decirse, la esperanza es lo último que se pierde. Hange, a la que presumiblemente se podría creer muerta por la explosión, aparece para insuflar de ánimo a Jean y compañía. El plan es bueno, no duda en reconocerlo, y es ella la que logra completar la tarea que Sasha no pudo. Cuando la mandíbula de Reiner cae, abierta, Mikasa le da el golpe de gracia y la explosión lanza el cuerpo de Reiner al exterior. Tras muchos intentos, han logrado ganar su propia batalla.
“Valiente”, que así es cómo se titula el episodio, hace clara referencia a un personaje en concreto. Armin tiene un plan para derrotar al Titán Colosal y, para ello, necesita a Eren.
Ver el mar ha sido el gran objetivo de Armin desde que inició la serie. Sus ojos, del mismo color azul que el del océano, siempre se iluminan cuando habla de ello. Descubrir qué hay más allá y el entusiasmo por la libertad ha sido algo que los ha mantenido a los dos unidos. Eren seguirá las instrucciones de Armin y, cuando todo acabe, irán juntos a cumplir su sueño. Sin embargo, el rubio tiene otros planes. Desde el principio, la intención de Armin es morir para darle a Eren la oportunidad de vencer a Bertholdt. Haciendo de distracción, Eren no solo puede tapar el agujero en la muralla, sino que también es capaz de abrir la nuca al titán y extraer el cuerpo de Bertholdt. Pero, todo tiene un precio. Armin expone su cuerpo al calor y al vapor extenuante que es capaz de emitir el Titán Colosal.
El espectador es testigo. probablemente, de una de las muertes más dolorosas de toda la serie, al ser Armin abrasado vivo. Armin Arlert da una lección de lo que significa ser valiente. Con su sacrificio, Armin no solo renuncia a su sueño de ver el mar, sino que también soporta un dolor terrible al ser quemado vivo. Armin es un personaje que demuestra que la fuerza más poderosa de una persona no siempre radica en la física, sino que el más valiente es aquel que está dispuesto a abandonarlo todo por una causa mayor. El más valiente es aquel que, a pesar del miedo y del dolor, es capaz de darlo todo, incluso su vida.
Wit Studio nos regala el que es, posiblemente, el mejor episodio de todo Ataque a los titanes. Los picos de acción están bien distribuidos, la animación sobresale y, sobre todo, la música acompaña a los momentos más señalados. Ver el cuerpo abrasado de Armin sobre el tejado de una de las casas en Shiganshina deja en shock a Eren y, también, al espectador. Quizás las Tropas de Reconocimiento hayan ganado esta guerra, pero se abre la incógnita de a qué precio pues, además de incontables soldados, han perdido a dos figuras fundamentales: Erwin y Armin.
El episodio de la semana que viene se presenta como otra montaña rusa más de emociones que está siendo esta segunda parte de la tercera temporada. Para quitar este sabor amargo y de casi triste despedida a otro personaje más, dejamos un dato curioso para acabar: si la semana pasada al primer titán al que mataba Levi tenía la cara de Marina Inoue, seiyuu de Armin, en esta ocasión ha sido turno de dos titanes con los rostros de Yui Ishikawa, seiyuu de Mikasa, y Yuki Kaji, seiyuu de Eren, detalle del manga que Wit Studio ha querido trasladar también a la adaptación animada.
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