El pasado 30 de agosto se emitió el vigésimo segundo capítulo de Boruto: Naruto Next Generations en la plataforma digital Crunchyroll. Se trata de la continuación del ya mítico shônen Naruto. Esta nueva etapa narra las aventuras de Boruto, el joven hijo de Naruto, ya convertido en Hokage, que recorrerá su propio camino del ninja.
Os dejamos con las impresiones de este episodio. Como siempre, recordamos que las siguientes líneas contienen spoilers sobre la trama del mismo.
Este episodio se ha caracterizado más por la intensidad emocional y la información revelada que por los combates.Por un lado, Naruto y Sasuke, acompañados de Sarada y Chou Chou han ido a pedir ayuda a Orochimaru, ya que han descubierto que de alguna manera está relacionado con Shin Uchiha. Este reencuentro también marca el regreso de los antiguos compañeros de Sasuke de Taka/Hebi: Jugo y Suigetsu, los cuales siguen ayudando a Orochimaru. Este les cuenta a nuestros protagonistas que Shin Uchiha era un discípulo suyo, que Danzo poseía su brazo y que Shin, lejos de ser un Uchiha no es más que un sujeto de pruebas que destacaba por tolerar cualquier tipo de transplante. Todo ello deja con la sensación de que Shin es un antagonista algo carente de interés, al menos de momento.
Por otro lado, tenemos a Sakura en la guarida de Shin. Es una escena algo más intensa, donde se vuelve a tratar el tema de los lazos, en este caso los lazos familiares entre padres e hijos, los cuales Shin, que crea clones de sí mismo con sus dientes y nervios no parece entender.
Sin embargo, el punto culminante del episodio tiene como protagonistas a Sarada, Naruto y Suigetsu. Sarada pide ayuda a este último porque quiere saber si Karin realmente es su madre. Suigetsu accede a ayudarla y tras obtener células del cordón umbilical de ¿Karin? y tomar muestras de la saliva de Sarada finalmente comprueban que ambas muestras coinciden, por lo que aparentemente Karin es la madre biológica de Sarada.
Todo esto causa un gran impacto en la joven ninja, sin embargo Naruto se percata de la situación y tras hablar con ella logra convencerla de que realmente los lazos afectivos no están regidos por la sangre o los genes. Sarada logra echar la vista atrás y comprender que Sakura, sea o no su verdadera madre, siempre ha cuidado de Sarada.
Por fin el grupo, ya con las ideas ordenadas y descansados deciden que ya están preparados para ir a rescatar a Sakura.
Este es el tercer episodio seguido en el que se ausenta Boruto, cediendo el protagonismo a sus compañeras y a sus mayores. Un capítulo interesante, emocionante y revelador, donde la música sigue sobresaliendo. Pero en esta ocasión por momentos la animación ha flojeado bastante, sobre todo en movimientos muy sencillos que han lucido muy acartonados y hechos con prisa.
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