Una historia de fantasmas
Sakura esta cansada de no ser una chica normal. Todos los días aguanta las continuas apariciones de espíritus y no entiende de donde le viene su curioso don. Un día aparece en clase un chico con el pelo rojo y vestido con un curioso haori (chaqueta japonesa a modo de kimono con grandes mangas), que tras ser comido por chihuahua gigantesco desaparece.
Acostumbrada a las más extrañas apariciones Sakura ni se inmuta. De camino a casa vuelve a encontrarse con el misterioso chico, y cuán grande es su sorpresa al descubrir que no se trata de un fantasma.
Rin-ne Rokudô va a su clase, pero es la primera vez que aparece en todo el curso. Él también se muestra sorprendido por el don de Sakura, pero se aprovecha bastante de ese punto para conseguir algo de dinero, que al parecer no le sobra.
Y es que para hacer subir a los espíritus a la rueda de la reencarnación se necesita efectivo. Rin-ne encuentra la manera perfecta de continuar su trabajo gracias al monedero de Sakura, y ella, no se sabe muy bien si por pena o por curiosidad, se deja llevar.
Rokudô resulta ser «algo así» como un shinigami, que se encarga de guiar a los espíritus perdidos hacia el otro mundo.
Pronto descubrimos que se trata de un personaje bastante sufridor. Lleva el mismo chándal que en secundaría porque no tiene dinero para comprarse el uniforme del instituto, vive en un edificio anexo al centro escolar porque no puede pagarse un alojamiento y se dedica a hacer flores de tela manualmente para conseguir algunas monedillas.
El dinero es su mayor preocupación, tiene un carácter un tanto arisco y reservado, aunque no duda en quitarse los complejos de encima con tal de conseguir comida.
Las comparaciones siempre son odiosas
Es innegable que Rin-ne se ha quedado con muchísimas cosas de la recientemente conclusa Inuyasha.
Rumiko parece haberse quedado bastante apegada al mundo sobrenatural, y aunque en esta ocasión parecen primar las historias de corte cotidiano, no cabe duda que finalmente la trama adquirirá un cariz mucho más oscuro.
Otra punto a destacar es el dibujo, la autora sigue la linea trazada en su última obra con perfiles mucho más angulosos y un dibujo más claro y limpio.
En una primera lectura podemos apreciar como Takahashi dibuja con ciertos «dejes», como posturas de ataque estáticas o determinados ángulos que parecen gustarle especialmente.
En Rin-ne encontramos una historia ambientada en un instituto y a dos estudiantes que se dedican a cazar espíritus. En los últimos años el números de tramas similares que ha dado el manga son incontables. Empezando por Bleach y siguiendo por otros shonen como Kekkaishi o Armamento Alquimista.
Lo que queda claro es que el planteamiento no es el más original del mundo, pero lo que es bien seguro es que el buen saber hacer de Rumiko desencadenará una diferenciación palpable respecto al resto de obras de temática similar.
Rumiko Takahashi, genio en estado puro
¿Hay algo sobre Rumiko Takahashi que no se haya dicho ya?
Esta mangaka nacida en 1957 en Niigata se ha convertido en internacional, y no precisamente por su asistencia a convenciones, ya que las huye y se ha declarado en numerosas ocasiones excesivamente tímida, si no por saber transportar el humor japonés más allá de sus fronteras, demostrando una vez más que las personas no somos tan diferentes entre nosotras y que el humor es un concepto global
La carrera de Rumiko comenzó en el año en 1975, cuando la joven mangaka aún estudiante de universidad, publicó su primera obra llamada Kyojin no Hoshi (Una estrella de inútil polvo) en el periódico de su universidad.
Desde 1975 hasta 1978 editó varias sus historias cortas en publicaciones amateurs, hasta que finalmente en junio de 1978 una de sus primeras obras cortas apareció en la que sería su revista madre, la Shonen Sunday de la editorial Shogakukan. Esta primera obra se llamaba Kattena Yatsura (Esos egoistas extraterrestres) y representaría un primer acercamiento a la que sería una de sus obras más famosas, Urusei Yatsura.
Gracias a esta pequeña historia que más tarde sería recopilada en el tomo «El mundo de Rumiko» recibió el premio Rookie Comic Contest de Shogakukan. Mientras continuaba publicando historias cortas en julio de 1978 Rumiko dio a luz su primer éxito de masas, Urusei Yatsura, más conocida como Lamu.
En 1980 y mientras llevaba a cabo su serie regular Urusei Yatsura en la revista Shonen Sunday, la buena de Rumiko ni corta ni perezosa comenzó una nueva serie que sería una de las más queridas de su carrera, Maison Ikkoku.
Inspirada en gran medida en su propias vivencias en una residencia, Maison Ikkoku nos cuenta la curiosa vida de un grupo de vecinos que viven en habitaciones alquiladas, con una divertida historia de amor en primer plano entre la encargada de la residencia y uno de los inquilinos.
Tras terminar ambas obras en 1987 y sin perder un solo segundo, Rumiko comenzó a trabajar en su próximo proyecto, Ranma 1/2.
Una obra en clave de humor con un alto componente romántico de fondo y que la catapultó a la fama a nivel internacional, siendo esta su obra abanderada por excelencia.
Tras la finalización de Ranma 1/2 con un total de 38 tomos en el año 1996, de nuevo y sin descanso alguno la autora comenzó a trabajar en su nueva obra, Inuyasha.
Las aventuras del perro-demonio y su búsqueda de la joya de las cuatro almas fueron publicadas en la revista Shonen Sunday desde 1996 hasta 2008, concluyendo con 56 tomos y con un nuevo récord para la mangaka por su obra más larga hasta el momento.
Pero los que ya conocemos a Takahashi sabíamos que no tardaría demasiado en volver a estar al pié del cañón, y así fue, tras tan solo un par de meses de ausencia, pasando por una colaboración especial con Mitsuru Adachi, Rumiko Takahashi nos presentaba su nueva creación Kyokai no Rin-ne.
Rin-ne comenzó a editarse en abril del año 2009 en las páginas de la revista Shonen Sunday, como no podía ser de otra forma.
Pequeña adaptación al anime
Con ocasión de la exposición «Este es el mundo de Rumiko», Rin-ne pasó a tener un pequeño fragmento animado como parte del contenido especial de la Rumic World Anime Box que posteriormente se editó en Japón.
Esta Box contenía una pequeña introducción de Rin-ne así como tres ovas inéditas de series como Inuyasha, Ranma 1/2 y Lamu.
Tal vez esta pequeña introducción no sea más que un aperitivo, pues estamos más que seguros de que Rin-ne será adaptado al anime en cuanto sume el número de tomos suficientes como para mantener una adecuada periodicidad de capítulos.
La Edición
Planeta DeAgostini ha vuelto a hacerse con un título de la super ventas Rumiko Takahashi. Desde la antigua edición de Ranma 1/2 y One Pound Gospel no se había vuelto a ver nada de la autora en la editorial.
Esta vez Planeta nos ofrece un tomo con una calidad de papel bastante alta, mucho más que otras obras compañeras de publicación. Un tomo muy correcto con una cuidada traducción y fiel al original, un gran trabajo por parte de la editorial que parece que tiene intención de mimar la obra.
Lo Mejor: El personaje protagonista, Rin-ne.
Lo Peor: La temática trillada.
Ficha técnica
Título: Rin-ne
Título origininal: Kyoukai no Rinne
Dibujante: Rumiko Takahashi
Editorial japonesa: Shogakukan
Editorial española: Planeta DeAgostini
Formato: Rústica con sobrecubierta, 192 pág. B/N
Precio: 7,95€
Nº de tomos Japón: 5
Nº de tomos España: 1
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