Japón es un país que ha fascinado a Occidente desde el pasado. Sus innumerables mitos y leyendas, de dioses y criaturas fantásticas, han capturado la imaginación de cientos de exploradores, comerciantes y escritores desde que el comercio del país se abrió al resto del mundo. Afortunadamente, desde el comienzo muchos escritores occidentales intentaron recopilar y difundir esta mitología. Por eso es de agradecer, que una vez más, Satori Ediciones nos brinde la oportunidad de adentrarnos en el camino de los kami y los oni.
La mitología japonesa está muy ligada a la religión popular y vernácula de Japón, el sintoísmo. Los dioses (kami) están presentes en todas partes: en el agua, las montañas, la naturaleza, etc. Pero esta obra nos acerca al extenso panteón sintoísta y nos abre las puertas a todas las tradiciones de las que Japón ha ido nutriéndose, como el budismo o el zen. Descubrimos también un particular universo poblado por criaturas extrañas como los oni, similares a los ogros; los kappa, criaturas acuáticas de fuerza descomunal o los dragones, que custodian tesoros en el fondo del mar. Y por supuesto, como en muchas otras culturas, es a través de los mitos fundacionales como descubrimos el origen divino de un país, es este caso Japón, nacido por obra y gracia de los dioses.
El autor
Frederick Hadland Davis fue uno de los principales estudiosos británicos de la filosofía de Extremo Oriente de principios del siglo XX. No solo escribió libros sobre la cultura y folclore japonés, sino también sobre la historia de China y ,especialmente, sobre los místicos persas. Entre sus obras destacan libros como El noveno inmortal y otros cuentos de China y Japón, La sabiduría del este – Los místicos persas: Jami, Japón desde la era de los dioses hasta la caída de Tsingtau y Los místicos persas: Jalalu’d-Din Rumi.
Una estructura interesante
Lo primero que se encuentra el lector al empezar la lectura de Mitos y leyendas de Japón es un prólogo escrito por la doctora en historia del arte Yayoi Kawamura. Aunque corto, este prólogo ayuda al lector español a contextualizar la obra.
A continuación, el autor escribe una pequeña introducción, y agradecimientos, explicando la motivación para crear esta obra y prepara al lector para su lectura. Es importante en este punto señalar que cuando fue escrita esta obra no había prácticamente obras similares de este calado sobre la mitología japonesa. Esta introducción no solo ayuda al lector a adentrarse en las leyendas, sino que deja entrever la forma de entender el mundo del autor, algo que para bien o para mal estará presente durante gran parte de la lectura.
Una vez pasado los prólogos, el libro presenta al lector 31 capítulos en los que se recogen leyendas de todo tipo. Si bien muchas de las secciones corresponden a una historia en particular, otras secciones aglutinan varias secciones relacionadas entre sí.
Por ejemplo, el primer capítulo nos presenta varias historias sobre los dioses de Japón, desde la leyenda de la creación con Izanagi e Izanami hasta la famosa historia de Susa-no-o y la serpiente. Por otro lado, en el tercer capítulo el autor narra y comenta la famosísima, casi hasta la saciedad, historia de la princesa Kaguya.
Esta variedad entre las secciones, hace que la extensión de los capítulos varíe desde unas pocas páginas hasta casi la centena. De igual forma, las historias van desde cuentos clásicos, narraciones de leyendas, descripciones sobre seres mitológicos o comentarios sobre la sociedad japonesa y sus costumbres.
Quizá el punto más negativo sea la falta de organización de los capítulos. El libro lista todos los capítulos saltando desde historias sobre los dioses, a leyendas sobre zorros, o sobre el arte japonés. Y aunque esto no afecta a la lectura sí que ofrece una sensación de desorganización.
Leyendas y mitos
Esta obra es una excelente fuente de información para conocer los mitos y leyendas más famosos de la cultura japonesa. No solo contiene información sobre los dioses, seres sobrenaturales, sino que está repleto de pequeñas historias y canciones sobre cada uno de estos seres.
Gracias al gran número de leyendas y mitos que recoge esta obra, la mayor parte de los lectores encontrarán en este libro una fuente casi inagotable de historias sobre el folklore japonés. Como hemos comentado anteriormente, estas obras van desde pequeños relatos de un par de párrafos, a cuentos completos de varias páginas. De igual forma, la importancia va desde la princesa Kaguya a simples cuentos cortos para niños.
Además muchas de las historias incluyen pequeñas canciones y versos, presentes en la tradición oral original pero omitidas en muchas de las adaptaciones posteriores. Con esto el autor dota a su obra de un aura de fuente primaria para la lectura de estas historias.
Y aunque se echan en falta algunas obras, en general el autor ha conseguido recoger la inmensa mayoría de las historias sobre la mitología japonesa, sus dioses (budistas y sintoístas) y la cultura de Japón. Todo esto narrado y comentado por el autor con un estilo de escritura muy singular.
Un estilo interesante
El autor ofrece un estilo ameno que ayuda a la lectura de cada uno de los relatos. Este estilo de lectura varía desde un estilo más impersonal, por ejemplo durante la narración de las leyendas, hasta un estilo más personal, usado durante la mayor parte de los relatos sobre las costumbres japonesas. Además, el autor alterna un modo más descriptivo, al describir el contexto sobre algunas de las historias y muy similar a una obra de investigación, a un modo más narrativo más cercano al estilo tradicional de los cuentos e historias de folklore.
Esta alternancia entre estilos, puede descolocar a los lectores, ya que la obra está a medio camino entre el recopilatorio y el estudio de investigación. Y aunque el autor juega con estos dos estilos de una manera bastante ágil, esta indeterminación sí que puede molestar a algún lector que busque una obra más cercana a la recopilación pura de relatos, o que desee una obra más cercana a la investigación de los mismos. Y en cualquier caso, estos son detalles muy irrelevantes, que para nada afectan a la calidad de la obra.
Un Japón romántico
Es imposible separar al autor de la obra, pero más en una obra de estas características. Durante las narraciones de las leyendas, el autor hace comentarios y comparaciones para ayudar al lector a entender el contexto de las obras. Y aunque en esos comentarios ya se aprecia un cierto sesgo a la tradición británica, en general el autor es bastante comedido en sus comentarios.
Pero, no se puede decir lo mismo de los capítulos sobre aspectos de la cultura japonesa donde el autor se explaya comentando las costumbres japonesas mientras las compara con la tradición británica. El autor en ningún momento intenta distanciarse de su bagaje cultural, y durante todo el libro, en especial en estos capítulos, dejando patente su orientalismo y su idiosincrasia inglesa.
Este sesgo orientalista se nota sobre todo en los sucesivos comentarios sobre la espiritualidad oriental, y su tradición sobre las ceremonias. Y aunque este sesgo nunca llega a hacerse molesto, salvo en los capítulos sobre costumbres japonesas, si que impregna toda la obra, obligando al lector a estar siempre consciente de su existencia.
Un ejemplo claro de este sesgo se puede ver en capítulos como Acerca del té, capítulo sobre la ceremonia del té japonesa y la filosofía y mitología asociada a ella. En el capítulo, el autor compara la tradición británica del té con la tradición japonesa del té. El autor contrasta el factor social de la tradición inglesa, con el matiz más espiritual y ceremonial de la ceremonia japonesa. A continuación entrelaza el origen del té, y de la ceremonia en sí, con varios mitos asociados a la misma. Pero siempre comparándolo con la tradición inglesa, y otorgando un aura de misticismo a la ceremonia japonesa.
Aún así este barniz orientalista y británico que llena toda la obra, en ningún momento dado llega a desmerecer la obra. Simplemente, la convierte en un producto de su época, y añade cierto encanto a las lecturas. Además, ayuda a los lectores más hábiles a entender la visión occidental de principios del siglo XX.
Un nuevo formato
Mitos y leyendas de Japón, es una traducción al formato de bolsillo de esta obra publicada en 2008 por la editorial. En esta ocasión, el libro está editado en encuadernación rústica con solapas (105 x 148 mm), 536 páginas y tiene un precio de 17€.
La gran diferencia con la edición de 2008, aparte del cambio de encuadernación, es la pérdida de las preciosas 34 ilustraciones a todo color de la obra original. Estas ilustraciones, realizadas por Evelyn Paul, sí estaban presentes tanto en la obra original como en la edición de 2008. Y aunque no es una pérdida tan grave, a fin de cuenta servían exclusivamente como refuerzo visual de las historias, y tiene sentido por el cambio de formato, si que podría llegar a molestar a algún lector. En especial, este cambio puede irritar a aquellos lectores que busquen en un libro no solo por las historias que ofrecen, sino por su similitud con la obra original.
Aunque hubiera sido ideal mantener las ilustraciones en este formato, es algo comprensible haber prescindido de estas para trasladar el libro a un formato más dinámico como es el libro de bolsillo. Afortunadamente, todavía es posible adquirir la edición de 2008 con las ilustraciones originales.
Aparte de las ilustraciones, esta nueva edición ha prescindido tanto del glosario de dioses, como de la genealogía de estos. Pero quizá lo más flagrante es la ausencia del índice onomástico, algo totalmente necesario para una obra de estas características. A diferencia de las ilustraciones, estas omisiones son mucho menos justificables y sin duda empeoran una edición, que por lo demás es bastante práctica.
Afortunadamente, para acabar, Satori ha decidido mantener la excelente traducción que realizó Marián Bango Amorín. Esta traducción, no solo consigue trasladar el mensaje original, sino que mantiene el curioso estilo del autor original de forma casi transparente para el lector. De hecho, salvo en un par de ocasiones, la traductora no ha necesitado añadir información adicional al lector para entender un pasaje.
Esta traducción, no solo consigue trasladar el mensaje original, sino que mantiene el curioso estilo del autor original de forma casi transparente para el lector. De hecho, salvo en un par de ocasiones, la traductora no ha necesitado añadir información adicional al lector para entender un pasaje.
Conclusiones
Mitos y leyendas de Japón es una obra llena de multitud de historias sobre el folclore japonés. Este libro fue el precursor de multitud de obras que recopilaron y ampliaron la mitología japonesa, desde los monstruos y leyendas, hasta las historias de los dioses. Y aunque el paso de tiempo se nota en esta obra, en especial por el estilo y prosa del autor, sigue siendo una obra de referencia para entender la mitología japonesa.
Por último, ante la duda de qué edición comprar, el lector tendrá que decidir si un formato de bolsillo y 9€ de diferencia compensan la pérdida de las ilustraciones a color de la obra original. Y aunque es una pena no haber incluido las ilustraciones, al final la elección pasa por el uso que pretenda dar el lector a la obra.
En definitiva, Mitos y leyendas de Japón es una obra imprescindible para conocer el folclore japonés. Y aunque este libro no está exento de problemas, sin duda su nuevo formato conseguirá que más lectores se interesen por esta obra y sobre los misterios de las leyendas de Japón.
Lo mejor
- El nuevo formato del libro invita a su lectura en cualquier ubicación.
- La variedad de mitos e historias presentes en el libro.
- Un excelente repertorio de leyendas.
Lo peor
- Se nota demasiado la opinión del autor y su sesgo a la mitología británica.
- La estructura del libro y de cada relato e historia es extraña y confunde al lector.
- La prosa en algunas secciones puede hacerse algo tediosa.
- Esta nueva edición no contiene las preciosas ilustraciones a color de la obra original.
Mitos y leyendas de Japón
Editorial: Satori Ediciones
Formato: Formato japonés bunkoban
Tomos: (Finalizada)
Facebook
Twitter
Pinterest
Instagram
YouTube
RSS