Ser un dragón es una vida relativamente sencilla. Dormir, comer, cuidar de tus tesoros y lidiar de vez en cuando con los molestos héroes. La vida no podría ser más sencilla para el dragón Letty. Desgraciadamente, sus padres no opinan lo mismo y ahora tendrá que embarcarse en la aventura más peligrosa de toda su vida: buscar una casa.
Letty, un joven dragón, acaba de ser expulsado de su clan por cobarde. Para sobrevivir en un mundo hostil lleno de héroes que quieren darle caza, decide buscar una casa donde poder vivir tranquilo y seguro. Durante su periplo llega a sus oídos el rumor de que hay un elfo que se dedica al negocio inmobiliario. ¡Así comienza la tronchante historia de un dragón que intentará encontrar su guarida perfecta!
El dragón millenial
Dragón busca casa comienza con una de las premisas más ridículas de la historia del manganime. Un dragón cobarde, llamado Letty, es repudiado por su padre por ser un incompetente y un desastre como dragón. Por esto, Letty decide embarcarse en la aventura de su vida, buscar una casa tranquila y cómoda. Desgraciadamente, ser un dragón gigante en un mundo lleno de aventureros, héroes y monstruos, no es fácil y pondrá a prueba la suerte de nuestro gigante protagonista. Afortunadamente, para esta peligrosa y arriesgada misión en pos de una morada, a Letty le acompañará el elfo Dearia, que casualmente es arquitecto y un excelente agente de la propiedad.
Un dragón en busca de un hogar
Dragon, Ie o Kau, en su título original, es una obra de fantasía escrita por Kawo Tanuki e ilustrado por Choco Aya. El manga comenzó su publicación en diciembre de 2016 en las páginas de la revista Monthly Comic Garden de la editorial Mag Garden, y actualmente cuenta con 7 volúmenes recopilatorios. Además del manga, el pasado 4 de abril comenzó la emisión de la adaptación al anime de esta obra, bajo el mismo título. La serie la dirige Haruki Kasugamori para el Signal M.D. con música de Kyōhei Matsuno.
El señor de los pisos
El manga de Dragón busca casa ofrece todo lo que se espera de una obra de este calado. Es una comedia situacional bastante entretenida, donde se transforma una premisa anodina, como buscar una nueva casa, en una experiencia ridícula gracias a la ambientación fantástica. Ya desde la primera página, con una clara referencia a Mi vecino Totoro, esta obra deja claro cuales son puntos fuertes: La subversión de la premisa de buscar piso mediante la localización en un mundo de fantasía, y el uso, y abuso, de referencias culturales de videojuegos, mangas, anime y un sinfín de obras populares.
Aunque a veces la historia bordea el absurdo, nunca llega a romper la coherencia interna del mundo. Siempre es capaz de coger una situación mundana, como por ejemplo comprar muebles, y convertirla en divertida usando a personajes fantásticos, como tener a las Moiras de dependientas. Kawo Tanuki consigue crear una situación cómica hilarante de manera muy sencilla y siempre siendo coherente con el mundo.
Esta narrativa basada en escenas cómicas permite al autor variar la situación y mantener fresco el manga sin necesidad de incorporar nuevos personajes secundarios en cada tomo, un defecto muy habitual en esta clase de obras. No obstante, aunque se intuye cierto trasfondo a los personajes, la historia no tiene, al menos en el primer volumen, un objetivo claro más allá de entretener. Aunque esto no es necesariamente algo negativo, sí que puede acabar quemando la premisa básica de la historia tras un par de volúmenes.
Por otro lado, el segundo gran elemento cómico de esta historia es el uso de referencias populares. Cada capítulo tiene referencias de todo tipo y a todos los niveles. Desde estéticas, como recrear el poste de Mi Vecino Totoro, hasta narrativas, explorar una mansión encantada en primera persona usando un aspirador como en el videojuego Luigi ‘s Mansion. Estas referencias no son meros guiños a otras obras, ya que el autor abusa de ellas de manera constante, en especial todas las relacionadas con los RPG. Y en que la mayoría de referencias están bastante bien usadas, si que pueden llegar a echar atrás a algunos lectores.
Por último, los personajes de esta obra muestran una química bastante tradicional entre sí. El dragón Letty es cobarde y asustadizo, mientras que el elfo Dearia ofrece un contraste con su personalidad más formal. Esta dualidad entre ambos personajes principales es usada por el autor para reforzar la escena cómica. Normalmente, Letty suele sufrir algún imprevisto, habitualmente debido a su torpeza o cobardía, mientras que Dearia se muestra impasible ante todas las situaciones. Y aunque no es una fórmula muy novedosa, en general es bastante entretenida. Quizá el único punto negativo sea la personalidad de Letty, que su cobardía y carácter acaba siendo demasiado cargante para el lector.
Un arte de otra época
Choco Aya ha elegido para este manga un estilo de dibujo realista, influenciado claramente en obras tradicionales de fantasía occidental como El señor de los anillos o Dragones y mazmorras. De hecho el manga evoca a obras clásicas de fantasía japonesa como Record of Lodoss War, donde se abogaba por un estilo mucho más realista y serio. Esto se puede ver en todos los personajes, desde principales, como el elfo Dearia tiene un aspecto estoico y lejano, casi mágico, hasta los más secundarios, con las hidras que parecen bellas mujeres aladas sacadas de un libro de literatura clásica del siglo XVIII.
Este estilo tiene tanto ventajas como inconvenientes en una comedia de estas características. El hecho de conservar en todo momento un aspecto formal y realista, ayuda a resaltar la absurdez de las situaciones. Muchas de las situaciones cómicas no tendrían tanta fuerza si no existiese este contraste. Por otro lado, el uso de este estilo probablemente ha hecho que la ilustradora no haya dibujado los fondos de algunas viñetas. Y aunque la ilustradora ha usado este truco de forma muy esporádica, lamentablemente sí que existen algunas páginas donde queda un poco extraño.
Pero quizá el mayor problema de este estilo realista sea la dificultad de expresar los sentimientos de los personajes. En otras obras, esto se solventa gracias a una narrativa más elaborada, usando más páginas y viñetas para indicar lo que piensa o quiere transmitir un personaje. Desgraciadamente esto no es posible en este manga, dado su estructura basada en escenas cómicas. Y aunque esto se podría haber solucionado deformando las expresiones faciales de los personajes, la autora ha optado por incorporar líneas de emoción, gotas y onomatopeyas sobre los rostros de los personajes. Y aunque en algunas situaciones este recurso estilístico puede quedar bien, a medida que se avanza en la historia acaba resultando cargante. Esto es especialmente sangrante en el caso de Letty donde casi en cada viñeta tiene una línea sobre su cara para indicar una emoción.
Una edición dracónica
Aún siendo el primer manga publicado por la Editorial Hidra, la edición de Dragón busca Casa está a la altura de las expectativas.
Dragón busca Casa está disponible en España en una cuidada edición rústica de tapa blanda con sobrecubierta, de 130 x 180 mm en blanco y negro. El primer tomo no sobrepasa las 200 páginas y contiene una portada alternativa a color en la primera página, a un precio de 8,5 €.
Aún siendo el primer manga publicado por la Editorial Hidra, se aprecia la experiencia de la editorial en esta edición. El papel ofrece un buen gramaje y las viñetas nunca se traspasan. Además, la traducción y localización es bastante correcta, conservando el humor de la historia.
Conclusiones
Dragón busca casa es una ligera comedia de fantasía. En ningún momento esta obra pretende competir con las grandes obras del género, como la maravillosa Tragones y Mazmorras, sino simplemente ser una historia llena escenas cómicas y divertidas referencias a obras populares. Y aún con sus defectos, este manga conseguirá sin duda hacer reír al lector, ya sea por la absurdez de la situación o por alguna inesperada referencia.
Lo mejor
- Una historia divertida repleta de referencias a videojuegos y fantasía.
- El cuidado dibujo de la ilustradora.
- El divertido contraste entre el estilo de dibujo y la historia.
Lo peor
- El dragón protagonista llega a ser cargante.
- El abuso de referencias a lo largo de la historia.
- Las onomatopeyas sobre los personajes, en especial en el protagonista, no acaban de quedar bien.
Dragón busca casa
Editorial: Editorial Hidra
Formato: Rústica de tapa blanda con sobrecubierta 130 x 180 mm.
Tomos: 10 (En publicación)
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