El corazón es el músculo más fuerte de nuestro cuerpo y aquí van algunas curiosidades: bombea más de 7.000 litros de sangre diarios, late 1.200 veces al día y puede hacerlo más de 3.000 millones de veces a lo largo de nuestra vida; incluso fuera de nuestro cuerpo sigue funcionando, aunque solo durante unas horas. Es, sin duda, otro ejemplo más de lo fascinante que es el cuerpo humano, pero ¿puede soportar todo tipo de males, hasta el romance más imposible?
El corazón es un ente complejo que nos hace aturullarnos con el sinfín de sentimientos que podemos crear: odio, envidia, tristeza, rencor, desidia, ira, amor, deseo… pero cuando se trata de amar, el resultado puede ser incluso fatal. ¿Existen las dos mitades de un mismo ser? ¿Estamos unidos realmente por el famoso hilo rojo del destino? ¿Es el amor que perdura más allá de la muerte el más leal y romántico?
No se puede negar que el amor está lleno de claroscuros y dificultades, pues puede darnos tanto infinitas alegrías como funestos pesares, especialmente cuando el ser amado es una prueba de la vida. Y en sufrir de mal de amores o de romances imposibles, Keiko Nagita es una experta. Prueba de ello es Bajo el cielo azul de Lorient.
La romántica Lorient
Bajo el cielo azul de Lorient nos presenta un paisaje idílico situándonos en la pequeña aldea francesa de Lorient donde Helena y Louis, nuestros protagonistas, viven sus infancias con auténtica felicidad. La historia da comienzo cuando llega al pueblo la pequeña Claudine, hija de una familia adinerada que pronto causa furor entre los niños por su ostentación constante de poder y dinero. Helena, que siempre es afable con todo el mundo, siente peligrar su relación con Louis al ver que éste le presta atención a la nueva, y es que ella lleva años enamorada en secreto de su amigo. No obstante, Claudine es demasiado altiva para codearse con los chicos plebeyos, aunque Roger, el primo de Louis, es igual de descarado que ella…
No obstante, pronto la tragedia golpea a la familia de Claudine cuando se descubre que el padre ha perdido todo el dinero de la familia y se encuentran en la más absoluta pobreza, a lo hay que añadir el suicidio del patriarca por pura vergüenza y el fallecimiento posterior de su madre. Claudine, desesperada y horrorizada por su inesperada miseria, huye a París, con Roger detrás. Años después, Louis se instala en París para estudiar y se reencuentra con Claudine, y es cuando descubre qué ha sido de su tortuosa vida…
Rorian no Ai Sora, en su título original, es una obra original de Keiko Nagita que cuenta con dibujo de Yoko Shima. Este manga shojo se serializó en 1974 en la revista Nakayoshi, de la editorial Kodansha, hasta finalizar en 1975 en un tomo único. En España, lo ha publicado Arechi Manga.
Cuatro destinos unidos por el amor
“Eres el cielo de Lorient en otoño // Los campos florecidos en primavera // La luz deslumbrante del verano.”
Siempre es un placer volver a adentrarse en los reinos de Keiko Nagita y, en esta ocasión, podemos hacerlo con este tomo que aglutina en sus casi 200 páginas una trágica y calamitosa historia donde cuatro jóvenes se ven unidos por los hilos del destino, la amistad y el amor. Situándonos en una pequeña aldea francesa, la mangaka nos narra la vida de cuatro adolescentes que, si bien inician el relato con esperanzas y sueños, donde retozan por los campos de lavanda y buscan tréboles sin más preocupaciones que las de un infante ignorante, pronto se ven abocados a la decadencia, la soledad y el infortunio cuando llegan a la edad adulta. Si a ello le añadimos un contexto socioeconómico delicado, en una época de depresión económica y de mentalidad tradicional, así como un amor agridulce y ácido, tenemos una lectura para no olvidar.
Nagita opta en esta ocasión por una narrativa coral, donde seguimos de cerca las vidas de Helena, Louis, Claudine y Roger; mediante un abanico de personalidades muy variopintas, donde podemos apreciar la bondad de Helena o el sarcasmo de Roger, además de una correcta representación de sus diferentes estatus sociales o académicos, queda un mapa más que interesante sobre cómo sus caminos se van cruzando hasta quedar unidos para siempre. De entrada, tenemos a Helena y a Louis, dos amigos de la infancia que siempre han vivido en semejanza, aunque sus sueños de futuro no pueden ser más diferentes: Louis sueña con ser poeta y estudiar, mientras que Helena solo suspira de amor por él y desea ser su esposa. Aunque podría parecer que esta relación no daría demasiado en una viñeta, la autora añade la nota discordante con Claudine, una niña bien de fuerte carácter y de ideas claras, y aunque parece que vaya a truncar los deseos de Helena, ella acaba bebiendo los vientos por Roger, el primo fanfarrón de Louis que en el fondo es todo un enamorado del amor.
Nagita añade así dos romances totalmente opuestos en conjunto pero que vemos crecer al unísono y que crearán toda una trama repleta de infortunio y desventuras donde nos costará vislumbrar un final feliz, pues aunque veamos el nacimiento de un amor puro y cándido con Helena y Louis, el turbulento y funesto destino que vivirán Roger y Claudine acabará invadiendo toda la trama. Con este cuadrante amoroso, la autora añade un muro imposible de derribar como es el contexto socioeconómico de la época, con la decadencia de la nobleza, con la ruina familiar de Claudine que la obliga a huir a París, creando un personaje con un aura de tristeza constante que nunca consigue alcanzar la felicidad y, curiosamente, arrastrará a los demás a su desdichado sino. En definitiva, una amarga crónica minuciosamente orquestada.
Sin duda alguna, Bajo el cielo azul de Lorient es una tragedia escrita perfectamente hilada y narrada que mantiene el alma en vilo hasta el final y no será nada fácil no derramar ni una lágrima con su desenlace, pues expresa el amor en todas sus variantes, desde el más pueril hasta el más enfermizo, aquel que arrebata el sentido y hasta la vida, y nos lo envuelve en un drama histórico donde no hay tiempo para respirar ni para rezar. La relación de los personajes es magistral narrativamente, pues vemos sus rencillas de pequeños y sus celos infantiles, para después apreciar cómo se valoran o se aman sin reservas; en este punto cabe destacar la amistad creciente entre Helena y Claudine, pues aunque empiezan como enemigas, la adversidad las convierte en hermanas. Por último, un contexto detallado que consigue poner fácilmente al lector en situación, conocer las costumbres de la época y entender por lo que pasan los personajes, o palpar incluso la pobreza de Claudine y su desesperación por rememorar tiempos pasados. Y nada de esto no sería posible sin el increíble trazo de Yoko Shima, quien sabe plasmar este melodrama con una pluma minuciosa y encantadora, aunque no escatima en escenas peliagudas o en retratar la agonía de sus protagonistas con la mirada de horror por lo que viven.
Bajo el cielo azul de Lorient es un manga intenso, incisivo y sobrecogedor que narra sin tapujos los tortuosos caminos del azar y del amor que viven sus protagonistas, a quienes vemos amar, llorar y sobrevivir con el fin de conseguir todos sus sueños, aunque al final solo crean que han de esperar que el amor les salve de la vida, de la muerte y de la desdicha. Y por ello es una lectura imperdible.
La gran Keiko Nagita
¿Quién es Keiko Nagita? Pese a que su nombre va ligado a una de las obras superventas más míticas de todos los tiempos como es Candy Candy, hay más talento detrás del nombre de esta japonesa. Y es que la autora ha vivido siempre por y para la escritura.
Nagita, oriunda de Tokio, Japón, empezó a escribir a los 12 años, pues la trágica muerte de su padre le hizo evadirse de la realidad entre las páginas de sus propias historias, para así apaciguar el dolor de dicha pérdida. Tal y como ha comentado en alguna entrevista, los personajes creados durante esa oscura época le reconfortaron y le hicieron sentir que tenía una familia que velaba por ella.
La futura escritora dedicó gran parte de su educación secundaria a escribir relatos y poemas que incluso le otorgaron reconocimiento y premios, aunque su trayectoria profesional no despegaría oficialmente hasta los 19 años, cuando empezó a trabajar para editoriales ofreciendo su talento para la pluma en forma de cuentos que se publicarían posteriormente.
En los años 70, la novelista se consagró por completo a la escritura y, bajo varios seudónimos como Kyoko Mizuki o Akane Kouda, publicó todo tipo de relatos y poemas para diversas editoriales. Es justamente en 1975 cuando nació Candy Candy como un proyecto para la revista mensual Nakayoshi, con dibujo de Yumiko Igarashi. La historia de la niña huérfana Candy White triunfó de tal manera que en 1976, la obra recibió una adaptación a la pequeña pantalla que le otorgó repercusión internacional, llegando a todas partes del mundo, incluida España, y quedando inmortalizada así para siempre en el recuerdo de los lectores y espectadores.
Si bien Nagita siguió dedicándose a la escritura y en los años 80 serializó principalmente cuentos juveniles y narraciones románticas para chicas jóvenes para distintas editoriales, en los 90 se encontró inmersa en disputas legales con Igarashi por su aclamada Candy Candy, pues la mangaka se lucraba de la imagen de la obra sin su consentimiento. Tras una dura lucha, la escritora consiguió que Igarashi no pudiera usar más la imagen de Candy sin el consentimiento de ambas, mientras que ella sí pudiera realizar continuaciones de la novela en el futuro, aunque sin ilustraciones. No obstante, este acuerdo imposibilitó la licencia del manga en otros países, cuya inhablitación sigue vigente.
La autora se permitió unos años de descanso y volvió a principios del 2000 para continuar escribiendo y dedicándose profesionalmente a la escritura, y en esta etapa cuenta en su haber con varios relatos e incluso guiones para mangas shojo. Entre las publicaciones de esta época destaca la obra presente, Reineta. La manzana dorada, que le otorgó el premio a Mejor Publicación Infantil por la Asociación de Escritores de Japón.
Nagita sigue en activo actualmente y una de sus últimas obras es Candy Candy Final Story, que lanzó en octubre de 2010 para la editorial Shodensha, y que continúa la historia original de la famosa huérfana.
La edición de Arechi Manga
Arechi Manga nos presenta Bajo el cielo azul de Lorient en una edición más que correcta y de calidad. El tomo está publicado en un formato de tapa blanda con sobrecubierta, de 18,2×12,3cm, con un total de 192 páginas, todas en blanco y negro. La editorial ha respetado la cubierta original, así como la contracubierta. Si retiramos la sobrecubierta, encontramos unas portadillas azules decoradas con flores.
Bajo el cielo azul de Lorient tiene un precio de 9 €.
Bienvenidos y bienvenidas a Lorient
¡Ay, el primer amor! ¡Qué gozo pero qué alboroto provoca! Keiko Nagita vuelve a demostrarnos que es una artista de la pluma con esta turbulenta y apasionante historia de amor que contiene todos los ingredientes para mantenernos al borde del asiento y sollozando por leer el final feliz que merecen los personajes, aunque no siempre sea así, porque si algo caracteriza a la mangaka, es la de ofrecernos lecturas que nos estrujan el corazón y hasta el alma.
Bajo el cielo azul de Lorient es una trama repleta de amistades verdaderas, deseos destemplados, sueños rotos y la inquebrantable fuerza el amor que sobrevive a todo tipo de adversidades, traspasa fronteras y hasta la propia muerte, y todo presentado con el encantador y arrebatador dibujo de Yoko Shima. Sin duda alguna, un manga intenso, vibrante y muy trágico que encandilará a los fans más selectos del melodrama más exigente. No os lo podéis perder.
Lo mejor:
- Una historia redonda con todos los ingredientes perfectos para atraparte
- Una trama turbulenta y pasional para leer con ganas
- Repleta de romance y tragedia
Lo peor:
- Si no te gusta el drama, no es para ti
Bajo el cielo azul de Lorient
Editorial: Arechi Manga
Formato: Rústica de tapa blanda y con sobrecubierta 128x182 mm
Tomos: 1 (Finalizada)
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