Han pasado dos semanas desde la celebración del 30 Salón del Cómic de Barcelona, y aún, a día de hoy siguen resonando los ecos de su celebración en las redes sociales, pero no precisamente por buenas razones. Durante estas dos semanas ha surgido en la red un movimiento alrededor del hastag en twitter #otrosalon, en la que muchos aficionados, autores, blogeros y demás personas relacionadas con el mundillo han expuesto sus opiniones a cerca del evento barcelonés, la mayoría opinando que este Salón del Cómic de Barcelona no les representa, y que #otrosalon es posible. Pues bien, yo aunque pienso que en algunas cosas sí tienen razón, creo que en otras tantas muchas se equivocan… al menos eso opino yo.
La mayoría de todas las opiniones que han surgido alrededor del movimiento #otrosalon comentan que FICOMIC ha transformado una feria que debía difundir el cómic y la historieta en una feria de ocio en la que el cómic importa poco o tiene poco que ver. Este Salón del Cómic, como bien se comentaba en uno de los blogs que inició este movimiento, parece que ha tomado el ejemplo de la ComicCon americana, un evento en el que a parte del cómic muchas otras expresiones de ocio, ya sean el cine, la televisión o los videojuegos; también tienen cabida, estén o no relacionadas directamente con el cómic.
En la base, creo sinceramente que este grupo tiene razón, pero por otro lado también pienso que FICOMIC no ha tomado este camino de emular al gran evento americano por propia iniciativa, sino obligada por los acontecimientos, por la necesidad de crecer cada año, y sobre todo por el actual marco de crisis económica en el que vivimos.
Seamos claros, ¿alguien piensa que un evento dedicado única y exclusivamente al mundo del cómic, con charlas sesudas sobre el mundo de la historieta, actos protocolarios con autores, presentaciones de editoriales, reuniones de autores y editores, y exposiciones de cómics que el gran público desconoce…. va a atraer a más de cien mil personas? ¿Es viable un salón sólo para y por para los más amantes del cómic y la historieta? Sinceramente creo que no.
Para conseguir mantener un evento como el Salón del Cómic de Barcelona en un recinto como es el de la Fira de Montjuïc, con una lista de invitados en la que estén nombres como el de Go Nagai, David Lloyd o Greg Capullo hace falta mucho dinero. Pero mucho. Y creo que actualmente, el mundo del cómic, sólo, no da para ello. Para montar un salón así, con esa extensión, ese emplazamiento y esa lista de autores hay que buscar patrocinadores, empresas que quieran poner dinero a cambio de espacio o promoción, y abrir un poco la temática del evento para atraer a más publico que no sea sólo el aficionado al cómic, y que paguen su entrada religiosamente.
Hay cosas en las que creo que si se puede criticar a FICOMIC, por ejemplo, en la aparente ausencia de un plan concreto o tema en cada edición del Salón. Es decir, en las últimas ediciones, el Salón parece un batiburrillo de cosas que se van consiguiendo, sin conexión unas con otras ni sentido. Si se quiere promocionar y crear nuevos lectores, creoque este año «lo tenían a huevo» con la película de Los Vengadores en los cines. Es algo que yo sinceramente no llego a entender, con una de las películas más taquilleras de los últimos años en los cines, relacionada con el cómic, con un universo tan rico como es el de los héroes Marvel, y en el Salón del Cómic -que se supone que es el evento más importante del mundo del cómic en nuestro país- ni un atisbo de este grupo de superhéroes que está reventando las taquillas de medio mundo.
Avengers en la NY Comic Con 2011 |
Es bastante público y notorio que algo debe pasar entre FICOMIC y Panini, pero creo que esta edición era la ideal para que ambos aparcaran sus diferencias y este salón hubiera sido «el salón de los Vengadores», con exposiciones de dibujantes españoles que hayan pasado por las páginas del cómic de Los Vengadores, con extras disfrazados de estos superhéroes por el salón haciendo las delicias de los niños, con un gran stand de Panini vendiendo cómics de Los Vengadores hasta hartarse, con las cadenas de televisión como Boing promocionando la serie de dibujos de Los Vengadores que tiene en su programación, o incluso Hasbro promocionando las figuras de Los Vengadores. Multidisciplinar si, pero con un tema que relaciona todas esas propuestas de ocio.
Escenario de Avengers de la NY Comic Con 2011 |
¿Qué niño no va ha arrastrar a sus padres para que le compren algo a un salón así, tras salir del cine y ver a Hulk aplastando alienígenas? En fin eso, si que creo que hubiera sido una gran manera de crear nuevo público y lectores de cómics. Así sí. Pero algo muy chungo debe ocurrir entre FICOMIC y Panini para que ninguno levantara un teléfono y dijera «oye, nos llevamos mal, pero vamos a aparcar nuestras diferencias, y a montar esto juntos para ganar los dos».
Bueno, pero volviendo al tema que nos ocupaba hoy, tengo claro que #otrosalon es posible, uno dedicado íntegramente a la historieta, con centros de reunión de autores y editores, zonas de exposición más amplias y variadas, con stands únicamente dedicados al mundo del cómic, pero no uno con esa lista de invitados ubicado en la Fira, al menos en España no. Si, todo el mundo cuando piensa en su salón del cómic ideal, le viene a la mente Angouleme, por ejemplo, pero desafortunadamente vivimos en España, donde leer un cómic aún sigue siendo a veces connotación de friki o crio, incluso dentro mismo del mundillo comiquero, donde los amantes de la historieta occidental rechazan a los fans del cómic oriental por que se sienten invadidos; y al revés por que los fans del manga ven aburrido y carca leer una «novela gráfica». Y mientras cosas sigan sucediendo, creo que no, creo que #otrosalon , al menos de las dimensiones y repercusión del de Barcelona no es posible.
Nos leemos en Twitter: @Batto_rp2
Este texto refleja únicamente la opinión del autor, y no necesariamente la de Ramen Para Dos, o de sus integrantes.
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