Bienvenidos a las impresiones del nuevo capítulo de la serie animada de One Piece. En esta ocasión nos toca analizar el episodio número 767. Seguimos recordando que este artículo puede contener spoilers.
En este capítulo, titulado “Una situación explosiva ¡El perro, el gato y el samurái!”, traslada la acción a la llegada de Kin’emon y Kanjuro al lomo del elefante, y lo que es peor aún, a la ciudad que anteriormente había sido destruida por buscar a un samurái.
El mono que les acompañaba en su viaje de subida, corre raudo hasta llegar a la campana que pone a todo el reino en aviso del peligro inminente. Tanto Inuarashi como Nekomamoshi, así como sus guardias actúan rápido y ambos llegan a la ciudad.
Intentando evitar que no se vean cara a cara, un guardia de Inuarashi mete la pata y acaban enfrentándose los dos líderes. Mientras tanto, los samuráis ven la escena tras un muro sin arriesgarse a salir. Los Sombrero de Paja llegan a tiempo, pero de poco les sirve, ya que Kin’emon toma la iniciativa y se dejan ver.
Este episodio, para quienes no sigan el manga, les sorprenderá. Como me ha pasado a mí. Ya que parece que acabará de una forma, pero la situación cambia y se convierte en uno de los mejores capítulos del arco de Zou.
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