Para que las plantas florezcan han de ser tratadas de forma adecuada, lo mismo ocurre con los sentimientos. Nieve en verano es un manga introspectivo que habla de las relaciones en la edad adulta con un toque sobrenatural. Una pequeña joyita que puede encontrarse completa en el mercado español de la mano de Tomodomo Ediciones.
Argumento
Hazuki se enamora de Rokka a primera vista. Todos los días pasa por su floristería y con la mala excusa de buscar una planta para su apartamento termina llevándose varias macetas que ya no sabe ni dónde poner, hasta que en un arrebato de valor termina pidiéndole trabajo.
Rokka es una mujer adulta y afable que enseguida se gana el corazón de Hazuki, mucho más joven que ella. Una noche mientras terminan de recoger la tienda Hazuki por fin consigue que ella le invite a su casa, pero toda su ilusión queda deshecha cuando descubre que no vive sola: hay un tío sin camiseta en su salón.
Espantado intenta huir de su desilusión amorosa, hasta que se da cuenta de que en realidad se trata de un fantasma, más concretamente del fantasma del difunto marido de Rokka, Shimao.
Hazuki es el único capaz de verlo y Shimao pronto le hace toda una declaración de intenciones: no está dispuesto a dejar que se quede con su mujer.
Un josei paranormal
Nieve en Verano se presenta con un primer volumen soberbio en un tono desenfadado y que crea demasiadas expectativas respecto a su desarrollo. Donde en un primer momento podríamos esperar un triángulo amoroso con la curiosidad añadida de que uno de los vértices es un fantasma, terminamos encontrando una historia atípica sobre posesiones y reflexiones acerca de la futilidad de la vida.
Lo que en un principio prometía ser un josei descacharrante de escenas llenas de interrupciones fantasmales desemboca en un mundo alegórico, un cuento reflexivo que no termina de funcionar. El engranaje de la relación entre Rokka y Hazuki chirría y parece irse “por los cerros de Úbeda” mientras Shimao hace de las suyas al más puro estilo de la película Ghost.
No obstante la autora parece reconducir ligeramente la conclusión de la historia en el último volumen, consiguiendo incluso que olvidemos lo extraños y desconcertantes que resultaron los dos anteriores.
Aún así cabe destacar el tono pausado, alejado del habitual ímpetu estudiantil con el que se nos narran las historia de amor, no por ello aburrido. En resumidas cuentas un buen producto con un dibujo sutil y bien elaborado, cuyas portadas están llenas de colores y simbolismo.
Los fondos están bien trabajados, son profundos y llenos de detalles, tanto en planos de ciudad de corte industrial como aquellos que evocan a la naturaleza, repletos de vida, hojas y ramas. Los gestos de los personajes son increíblemente ricos, con cientos de matices que transmiten a la perfección toda la gama de sentimientos que atraviesan a lo largo de la historia.
Y por supuesto están las flores, todas dibujadas con la perfección de un libro de botánica. Un paseo por toda la amplia gama de colores, formas que ofrece la naturaleza y que es un privilegio poder disfrutar.
El lenguaje de las flores
Los japoneses no son los únicos que otorgan significados a las flores o que gustan de hacer bonitos arreglos, pero es en el país del sol naciente donde esta práctica asciende al concepto de arte. El Ikebana es una disciplina ampliamente practicada y admirada en el mundo entero, tanto por su filosofía como por su buen saber hacer.
En la obra se nos presentan varias obras de Ikebana, así como explicaciones y detallados dibujos de flores que con el trazo de Kawachi se identifican a la perfección, siendo estas un fino hilo conductor de los sentimientos de los protagonistas.
El anime
Natsuyuki Rendezvous tal y como se conoce en Japón cultivó la fama suficiente para ser adaptada a un corto anime de 11 capítulos en el año 2012. Producida por el estudio Doga Kobo (Plastic Memories) y dirigida por Kô Matsuo, la serie pasó por las pantallas japonesas con un discreto éxito dentro del contenedor Noitamina.
La autora
Haruka Kawachi era una desconocida en nuestro país hasta que Tomodomo nos mostró su arte con Nieve en Verano. Kawachi debutó en 2001 en la revista Ax de Kogeisha con la historia corta “Hinemosu Waltz”, tras eso su estilo se hizo popular por la forma en la que representaba las relaciones entre hombres y mujeres, hasta el punto de ser apodado “la enfant terrible” del manga. Ha dibujado para muchas revistas y entre sus trabajos más populares se encuentra Sekine-kun no Koi y Engawa Gohan.
Se especializa en los género josei y romance de tipo slice of life.
Recientemente ha participado en un libro tributo de tipo recopilatorio con varias autoras llamado Marugoto Nekokke – Kumota Haruko “Itoshi no Nekokke”, de género yaoi.
Su estilo de dibujo es limpio, ausente de tramas donde priman los blancos y los negros, dando en ocasiones sensación de desolación o espacio vacío. Sin embargo cabe destacar su fluidez narrativa y sus bellísimas líneas que dotan de gran expresividad a los personajes. Los detalles son minuciosos y concienzudos, dotándolos de especial relevancia.
Un arte cuidado y bonito, de altísima calidad.
La edición
Tomodomo Ediciones saltó al mercado español con esta obra, Nieve en Verano es su “primogénita”, la primera aproximación de esta joven editorial a los lectores.
No deja de sorprender el gran trabajo realizado, que no por mucho nombrarlo deja de ser menos destacable. Tomodomo trajo esta obra con una calidad de papel superior, formato A5, impresiones inmejorables y portadas a todo color y en cartoné. Una edición de lujo a 8,95 euros que cumple con creces todo lo que cabría esperar, además ayuda a dar sensación de solidez al producto final.
Conclusión
Nieve en Verano es una historia sobre pérdida y encuentro, un drama que sobrecoge por la crudeza con la que representa la muerte y el sentimiento de culpabilidad hacia aquellos que ya no están. Todo ello salpicado de forma sutil con perlas romance y nuevas oportunidades. Quizás no es lo que parezca en un principio, pero sin duda es un manga a tener muy en cuenta y que encantará a todos aquellos aburridos de los romances convencionales.
Lo mejor:
- El planteamiento inicial
- El dibujo es bonito y la narrativa muy fluida.
Lo peor
- El nudo de la historia resulta confuso e incluso desemboca en una pérdida de interés por parte del lector.
Nieve en verano
Editorial: Tomodomo
Formato: Rústica con sobrecubierta. 14,8 x 21 cm.
Tomos: 4 (Finalizada)
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