Montage es un manga escrito y dibujado por Jun Watanabe, publicado en España por la editorial Planeta Cómic. Cuenta una historia basada en hechos reales, un robo de 300 millones de yenes (alrededor de 2.376.990 euros) que se produjo en la ciudad de Tokio en 1968. Por casualidades de la vida, sucedió el mismo día del nacimiento del propio mangaka.
Años más tarde y con mucha información recopilada, nos cuenta este acontecimiento desde su punto de vista y haciendo una reinterpretación brutal de la realidad. Donde añade no solo elementos de misterio y acción, sino también una crítica a la sociedad japonesa en general. No deja a nadie libre, incluyendo al sistema corrupto del Gobierno y a los policías.
En esta reseña voy a hablar de los tres primeros tomos de Montage, debéis empezar a leer por el tomo cero, ya que la historia comienza ahí. Después ya podéis hincarle el diente al tomo uno y dos. Si os interesa este tipo de historias escalofriantes, os animo a seguir leyendo.
Sinopsis
Yamato Narumi y su prima Miku se topan con un detective herido que les explica que su padre fue el autor del mayor atraco jamás realizado en Japón. Sin darse cuenta, se encuentran con más de 300 millones de yenes entre las manos y tendrán que encargarse de custodiar. Sin embargo, muchas personas ansían conseguir ese dinero…
El caso de los 300 millones de yenes
Antes de empezar a leer este manga, en la solapa podemos leer que el mangaka nació el mismo día que sucedió el robo de los 300 millones de yenes. Con este solo hecho, ya llamó mi atención muchísimo e hizo que quisiera averiguar cuanto antes qué estaba sucediendo.
La historia se basa en un caso real, como bien aclaran al final del tomo cero, es una reinterpretación por parte de Jun Watanabe. Explica tan minuciosamente cada detalle y cada información, que parece que estás viviendo tú mismo el caso.
Además, explica el trasfondo de la época de 1968, cómo la economía japonesa se estaba recuperando y creciendo sin parar después de la guerra. Pero cómo era de suponer, había un desequilibrio enorme entre clases sociales. Eso dió pie a muchas manifestaciones y movimientos en la calle. En especial, por parte de los estudiantes universitarios. No es necesario conocer estos datos, pero hace que entiendas mejor el contexto de la historia.
¿Cómo se produjo el robo? Te lo explican en las primeras páginas del manga. Un hombre con una moto se acerca al coche de la sucursal bancaria que estaba transportando los 300 millones de yenes, finge ser un agente de policía y pide a los integrantes del vehículo que se bajen, ya que hay una amenaza de bomba y puede que sus vidas estén en peligro. Tan rápido como puede, se sube en la posición del conductor y se marcha con todo. Así comienza la historia.
El Gobierno gastó muchísimo dinero en intentar encontrar el dinero robado y al culpable, movieron a miles de agentes, sin resultado positivo alguno. A pesar de encontrar muchas pistas, no obtuvieron lo que quisieron.
Me parece muy interesante que aporte tantos datos, porque así podemos hacernos mejor a la idea de lo que estaba viviendo la sociedad japonesa en ese momento. No solo eso, también ayuda a que podamos meternos más en la piel de cada personaje del manga.
¿Por qué el manga se llama Montage? Viene del retrato robótico que hizo la policía en su momento para intentar encontrar al ladrón del dinero. Parece que este nombre le hizo gracia a Jun Watanabe y lo utilizó para llamar así a su obra. Es un dato muy curioso y, a la vez, tiene mucho sentido.
Montage
La historia del manga gira alrededor de Yamato Narumi y Mika Odagiri, los cuales se ven implicados a raíz de un asesinato en el caso de los 300 millones de yenes. No solo eso, acusan al padre de Yamato de ser el ladrón. Al poco tiempo lo encuentran muerto, dejando huérfano a su hijo. De esta manera, Yamato es acogido por la familia de Mika.
Pasados unos años y tras lo sucedido, Yamato no ha podido olvidarse del incidente y busca información sobre el caso en todos los sitios posibles. Hasta que un día encuentra una pista clave que hará que empiece una investigación mucho más profunda para averiguar la verdad. ¿Dónde se encuentran los 300 millones de yenes? ¿Fue realmente su padre el ladrón? ¿Cómo lograrán escapar de los policías corruptos?
Las pistas se van sucediendo y viendo la luz poco a poco, pero no todas son verdaderas. ¿De quién se pueden fiar y a quién le pueden confiar la información que han obtenido? Ambos deben andarse con mucho ojo a la hora de elegir su círculo más cercano.
Una bomba de misterio, acción y asesinatos
Desde el primer momento estaba enganchada a esta historia. Saber qué estaba basado en un hecho real fue lo que más me llamó la atención. Pero según vas leyendo y descubriendo sobre el caso, más te ves implicado y más quieres seguir averiguando.
Obviamente, no todo es lo que parece. No todas las personas son buenas como deberían y siempre buscan sacar provecho de cualquier situación. En especial, el agente Sekiguchi tiene una doble personalidad con la que Yamato y Mika deben tener mucho cuidado. Los lectores podemos ver su auténtico ser, ya que se trata de una persona que haría cualquier cosa por conseguir su objetivo, le da igual matar a sus propios compañeros si se interponen en su camino. Parece más un miembro de la yakuza que un agente policial.
Las pistas que van encontrando los distintos personajes son complicadas y deben cogerlas con pinzas. Ya que no saben si son reales o falsas, incluso, ellos mismos para despistar al resto lanzan advertencias y dejan huellas erróneas para confundir. De esta forma, según vas leyendo el manga, el componente de misterio se va acentuando cada vez más.
“No confíes en absolutamente nadie”, es una frase que le dice el agente de policía herido antes de morir al joven e ingenuo Yamato al principio de la historia. Es una frase que le ronda la cabeza al protagonista constantemente, pero para llevar a cabo ciertos planes, debe ceder y compartir su información. Eso sí, siempre teniendo un plan B por si las cosas se tuercen.
Recomiendo aprenderse muy bien los nombres de todos los personajes, incluso, diría de apuntarlos en una hoja aparte. Ya que es fácil perderse con todos los flashback temporales que hay. No solo por eso, si te sabes los nombres y apellidos, luego es más fácil relacionar a los personajes entre sí. Porque el cambio entre épocas puede ser algo confuso.
Sobre el mangaka Jun Watanabe
Empezó su carrera ganando el concurso de artistas noveles en la Weekly Young Magazine, poco después, publicó su manga yakuza Kaemon TAKE 2, convirtiéndose en un éxito mundial. Con esta serie llegó a vender más de 24 millones de copias.
Pero lo que más llama la atención es que Jun Watanabe nació el 10 de diciembre de 1968, el mismo día que sucedió el robo de los 300 millones de yenes en la ciudad de Tokyo. Influido por este hecho, decidió escribir el manga de Montage y contar su propia historia basándose en este acontecimiento. El autor hace su propia interpretación de lo ocurrido, cogiendo datos que publicó la policía en su día y pistas que dejaron por el camino. A la vez, con esta historia también trata de criticar duramente a la sociedad y a la corrupción del gobierno japonés.
Como curiosidad, también sacaron en Japón una película basada en el manga de Montage de 90 minutos en total. Por supuesto, no abarca toda la historia ni mucho menos. Fue protagonizada por el famoso actor Sota Fukushi, que ha participado en muchas películas y series japonesas. Quizás os suene del live-action de Bleach, el cual, está disponible para ver a través de la plataforma Netflix.
Edición en España
Planeta Cómic ha publicado en España el manga de Montage al completo. Se trata de una serie de nueve tomos dobles en total. Su formato es B6, es decir, 130 cm x 180 cm en tapa blanda.
El tomo número cero es más finito que el resto, ya que tiene 208 páginas solamente y por este motivo cuesta solo 6,95 €. El resto de la colección ronda las 380 páginas, a un precio de 14,95€. Salvo el último tomo, que pasa de las 400 páginas.
Lo que más llama la atención son las portadas tan escuetas en blanco y negro, pero con el número del manga en un rojo muy llamativo, imitando a la edición original japonesa que publicó la editorial Kodansha.
Conclusión
Es un manga que ha conseguido engancharme desde la primera página. Se trata de un caso basado en hechos reales, lleno de intriga, misterios, asesinatos, escenas sexuales y delitos por doquier. Nunca sabes con qué te va a sorprender la historia o cualquiera de los personajes. Puedes pensar que van a tomar cierto rumbo, pero luego le da un giro inesperado. Muy recomendable si te gustan las historias de este tipo.
Lo mejor:
- La historia está basada en un hecho real.
- El halo de misterio que envuelve al manga.
- La capacidad de Jun Watanabe para hacerte sentir uno más dentro del caso.
Lo peor:
- Tanto flashback puede hacer que te pierdas en la historia.
- No tener el siguiente tomo para seguir leyendo.
Montage
Editorial: Planeta Cómic
Formato: Tomo doble B6 (130x180) rústica (tapa blanda) con sobrecubierta
Tomos: 9 (Finalizada)
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