Miyavi (1981, Prefectura de Hyōgo), una auténtica institución en Japón, dio sus primeros pasos en la industria musical como guitarrista de la formación Dué Le Quartz a la temprana edad de 17 años. Sin embargo 5 años más tarde y tras fichar por Universal empezó su propia andadura. Creador del sonido “Kabuki Rock” y del estilo “Neo-Visualism”, ha editado 5 discos entre los que destaca el excéntrico y extraño primer LP Gagaku y el magnífico Miyavizm (2005), un ejemplo de su enorme versatilidad y genialidad musical. Aunque es imprescindible verlo en directo para poder gozar de su máximo esplendor. Además, su imagen es arrolladora, potente y ambigua. Todo ello, acompañado por un sonido divertido, una técnica muy peculiar de tocar la guitarra y unas letras seductoras, osadas y con toques dramáticos hacen de Miyavi un cóctel explosivo y fascinante tanto para la audiencia masculina como femenina. Tremendamente atractivo para los más jóvenes ha trabajado como modelo y ha hecho sus pinitos en el cine apareciendo en la película nipona Oresama. Como curiosidad, cabe destacar que es mitad japonés y mitad coreano y que suele vestir con la ropa que le obsequian sus seguidores.
Después de varios tours por Asia y arrasar en Japón, Corea y China, en 2007 celebró con un gran éxito su primer concierto en Alemania. En 2008, con la presentación de su This iz the Japanese Kabuki Rock aterrizará en América, Asia y Europa.
La primera actuación de Miyavi en España, en la que presentó su último trabajo, provocó que se desplazaran a la Sala Apolo muchos adolescentes (¡¡algunos hicieron cola durante una semana!!) vestidos para la ocasión en una clara manifestación del auge de la cultura japonesa en nuestro país. Un fenómeno relativamente nuevo que reivindica una forma de ver el mundo y que recontextualiza una cultura ajena. Otakus de todo tipo que han adaptado, gracias a la influencia principalmente del manga, del anime, de la televisión y de la música, un estilo y una estética típicamente japonesa, propia de diferentes tribus urbanas niponas. Lo que está claro es que el torbellino Miyavi que se vivió en Barcelona (como de todo el J-Pop y sus diferentes géneros) no se debe exclusivamente a factores musicales. Fue una oportunidad de poder participar de un modo de vida y de una forma de posicionarse en el mundo: del Visual Kei al fenómeno Lolita pasando por tímidas aportaciones de la cultura del Cosplay. De hecho, no se puede separar, por lo menos en España, el análisis y la crítica musical sin relacionarla con dichos nuevos estilos de vida. La sociedad de la información ha propiciado la creación de comunidades que trascienden el propio lugar físico y que se posicionan en el mundo adaptando aspectos de otras culturas y mezclándolos con las suyas.
El directo de Miyavi es potente, entretenido y juguetón. Incluso en algunos momentos mucho más espectacular que en sus discos. Todo está perfectamente estudiado en un show de 2 horas en el se pudo ver a un Miyavi con tres “atuendos” diferentes (¡si, si, se cambió de ropa 2 veces!), un genial duelo de guitarra y claqué, un brutal solo de DJ con “riffs electrónicos” y “scratchings” desenfadados, los sonidos de un magnífico tambor Taiko y mucho “Funky-Hip-Hop-Rock” sin complejos.
Miyavi es un fantástico maestro de ceremonias y desde un principio lo deja claro: su entrada triunfal al escenario, precedida por la de su gran banda (bajista, batería, taiko drummer, bailarín de claqué, cantante y DJ) desató la locura en la sala Apolo: acompañado por un paraguas japonés tradicional, un abanico y su guitarra y enfundado en un especie de kimono, una camiseta sin mangas con un dibujo de una calavera, un pantalón negro ajustado, unas bambas plateadas y una gorra de color rosa. Entre guiños, excentricidades, saltos, giros, frases del tipo “Les Amo” y “Shake your Head” y gritos varios, uno a uno fueron cayendo sus mejores hits (Are you Ready to Rock?, Dear My Friend, Rock’n’Roll is not Dead y un largo etc.) hasta el bis de final de fiesta. Un espectáculo muy entretenido digno de ver en el que los fans, entregados desde la primera nota, disfrutaron como locos.
Es de agradecer que la promotora Naizo haya conseguido traer, por primera vez en España, a un artista de la talla de Miyavi a Barcelona para el disfrute de sus fans y esperemos que continúen así. Les deseamos mucha suerte.
Como apunte final, sólo decir que no se ha podido incluir ninguna fotografía o grabación del concierto ya que así lo pidió el propio Miyavi. Una lástima, no sólo porque no hemos podido mostrar lo que fue, sino también porque la cultura de la preservación de la memoria es básica para entender y disfrutar del fenómeno otaku.
Lugar: Barcelona (Sala Apolo)
Fecha: 27/06/08
Más información:
www.myspace.com/miyavi
www.o-re-sa-ma.com (Site Oficial)
www.naizo.es
www.myspace.com/naizo
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