Tras el combate entre Tanjiro e Inosuke contra la forma definitiva de Enmu, esta segunda temporada de Guardianes de la noche: Kimetsu no Yaiba da paso a la recta final de su segundo arco. Aunque parece que el combate ha finalizado, a la serie le queda alguna que otra sorpresa en forma de pelea.
Cada domingo a las 17:45 (hora española peninsular), Crunchyroll estrenará un nuevo episodio en su simulcast en versión original con subtítulos en español, una hora después de la emisión en Japón. Desde Ramen Para Dos, en nuestra review haremos también una pequeña recapitulación del regreso de una de las series más populares del momento. Aunque antes recordar que las siguientes líneas contienen spoilers de la trama del episodio.
El episodio recupera todo el momento final del combate entre Inosuke y Tanjiro contra Enmu. Al derrotar al demonio, el propio tren, que formaba parte de Enmu, descarrila. A pesar de que Tanjiro está en un estado crítico, se preocupa por el maquinista que le había acuchillado anteriormente. Bajo la frase «Si yo muero, serás un asesino», Tanjiro nos vuelve a demostrar su buen corazón. Un protagonista que antepone la integridad moral y física de los demás antes que su propia vida. Una visión que se diferencia claramente con la de Inosuke, un personaje impulsivo que se preocupa por la gente a la que le coge cariño, aunque no quiera admitirlo, y no por alguien que les intenta dañar.
Enmu, mientras desaparece, narra sus sensaciones al morir, una auténtica pesadilla. Un mal sueño creado por la fuerza y habilidad de nuestros protagonistas. Entre sus últimos lamentos, el demonio nombra las habilidades de Tanjiro, Nezuko, Zenitsu, Inosuke y Rengoku y todo lo que habían logrado: salvar a todos los pasajeros del tren. Antes de morir, Enmu desea acabar con Tanjiro, pero, por suerte o desgracia para él, su pesadilla cesa.
Rengoku, aparentemente intacto, se acerca a Tanjiro para ayudarle a cerrar la hemorragia. Mediante el control de la respiración, nuestro protagonista logra contener la herida. Parece una escena simple, pero que irá cobrando importancia a medida que avance la obra. Especialmente, nos deja claro el control mental, y sobre su propio cuerpo, que puede tener un Pilar. Además, nos deja claro que Rengoku es un personaje con una gran capacidad para enseñar y que, sin duda, sería el mentor perfecto para Tanjiro.
Sin dar tiempo al pilar del fuego, el accidente de tren se cubre de tierra. Un enemigo aterriza y en sus luminosos ojos podemos verlo claro: tercera luna superior. Akaza, quien da nombre a este capítulo, hace acto de presencia. Un demonio con una clara ambición: disfrutar de un buen combate contra un oponente fuerte, hasta el punto de que los humanos débiles le dan asco. Casi sin darse cuenta, Rengoku y Akaza se lanzan al combate.
La banda sonora compuesta por Gou Shina retumba con unas voces espectaculares en forma de coros. Por su lado, la animación de Ufotable deja un combate espectacular, rodeado de rojos y azules que demuestra el poder de ambos. Una pelea por demostrar la valía de los humanos frente a los demonios. Una batalla a muerte. Esto es visible incluso para el resto de personajes. A pesar de que quisiera ayudar Inosuke comprende que solo estorbaría y encontraría una muerte segura y el estado actual de Tanjiro solo pondría en peligro a nuestro protagonista.
El intercambio de golpes deja malherido a Rengoku, dejando a un Akaza deseoso de más combate. ¿Podrá Rengoku dar la vuelta a esta situación? La incertidumbre nos deja con un combate a medias, algo que en la película Guardianes de la noche – Kimetsu no Yaiba: El tren infinito era más agradecido debido a su formato. A pesar de eso, solo queda un episodio para acabar este primer arco de la segunda temporada antes de adentrarnos en el barrio rojo.
Facebook
Twitter
Pinterest
Instagram
YouTube
RSS