La doncella llegó al FICXixón 54 con gran expectación. No solo por ser el último trabajo de Park Chan-Wook, conocido mundialmente por Oldboy, sino también por ganar el premio técnico a la Mejor dirección artística en Cannes y el premio del público del pasado Festival de Sitges. Solo así se puede entender que la sala estuviera casi llena el pasado domingo a las 22:20, a pesar del horario. Y como suele ocurrir con el director coreano, no dejó indiferente a nadie.
Un mundo de falsas apariencias
Sookee es una joven ratera que malvive con su familia realizando todo tipo de estafas en la Corea ocupada de los años 30. Sin embargo, pronto recibe la oferta de un estafador para que trabaje como criada de una noble japonesa, a la que el estafador quiere engañar para quedarse con su fortuna. Todo parece sencillo, hasta que Sookee se ve cautivada por la belleza e inocencia de la joven Hideko, quien vive recluida en la gran mansión de su tío y que además pretende casarse con ella. ¿Podrá Sookee resistir la tentación de salvar a la pobre Hideko?
En esta nueva película, Park Chan-Wook nos presenta un historia de estafadores donde los personajes son sometidos al azar de los giros de guion y donde prácticamente hasta el final no se sabe quién es el cazador y quién el cazado. La película está dividida en tres partes bien medidas y diferenciadas, pero que interactúan entre sí de manera magistral y sin dejar ningún cabo suelto.
Pero el espectador no se encuentra ante una historia de estafadores sin más. Se encuentra ante un mundo lleno de falsas apariencias tras el cual se esconde un mundo de perversión, que se muestra tanto implícitamente como explícitamente (en algunas partes sexualmente muy explícitas). Esto necesariamente motivará diferentes reacciones y emociones inesperadas, tanto por los personajes como por los espectadores.
Un apartado técnico sobresaliente
Otro de los aspectos a destacar de la película es la ambientación y el apartado técnico. Tanto la mansión donde transcurre la mayoría de la trama como el vestuario de los actores plasman a la perfección la Corea del Sur de los años 30 que avanzaba hacia la occidentalización. Este contexto ofrece unos elementos que Park Chan-Wook explota logrando escenas realmente bellas.
Sin duda, La doncella es una película que deja satisfecho al espectador. Una buena historia que te tiene enganchado durante toda la película, algo bastante importante dadas las casi dos horas y media que dura la cinta, y en el que el espectador se verá a merced de los giros de guion y las emociones de los protagonistas. La cinta llegará a los cines de toda España el próximo 2 de diciembre de la mano de La aventura, aunque yo ya le tengo guardado un hueco entre mi colección.
Lo mejor: La trama y los personajes complejos que enganchan al espectador hasta el final.
Lo peor: Algunas escenas de sexo pueden herir sensibilidades.
La doncella
Distribuidor: La Aventura
Año: 2016
Tipo: Película imagen real
Duración: 145 min
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