Final Fantasy VII Remake es una reinvención de uno de los RPG clásicos más aclamados a nivel mundial. Desarrollado en Square Enix bajo la dirección de Tetsuya Nomura, el antiguo videojuego por turnos y reconvertido en uno de rol y acción, llegó a España el pasado mes de marzo de la mano de la distribuidora Koch Media en exclusiva para PlayStation 4. Es hora de revivir las aventuras de Cloud tal y como las conocíamos, o quizás no tanto.
La historia de cómo un mercenario acabó queriendo salvar el planeta
Final Fantasy VII Remake nos cuenta la historia de Cloud Strife, un mercenario al que en un inicio simplemente le interesa realizar su trabajo para ganarse la vida. Nos acompaña Barret Wallace, un hombre corpulento quien hace a la vez de jefe de una banda llamada Avalancha. Esta organización busca devolver al planeta su esplendor de antaño. Su decisión se debe a que una mega corporación llamada Shinra está extrayendo del planeta una energía conocida como Mako, y por lo visto, vital para el devenir de la población. Esta energía ofrece diversas comodidades, pero al mismo tiempo influye en el propio planeta, porque a raíz de ello está muriendo poco a poco.
En Avalancha, junto a Cloud y Barret, se encuentran otros miembros: Biggs, Wedge y Jessie. Y aunque sobre el papel sean personajes secundarios, tienen el suficiente desarrollo y protagonismo como para ser uno más de la banda protagonista. Y eso se debe al desarrollo y tiempo extra que han tenido en esta ocasión, a diferencia del videojuego original. Su primera misión es destruir uno de los ocho reactores Mako de la ciudad de Midgar. Cloud llevará a cabo la misión ciñéndose a su trabajo y evitando el mínimo contacto social posible. Su apatía es su sello de identidad.
Sin embargo, tras resultar exitosos en la misión, reencontrarse con su amiga de la infancia Tifa y conocer a otra serie de personajes como Aeris, Cloud irá cambiando de parecer, y acabará por unirse a la lucha contra Shinra. Esto es algo bastante difícil sobre el papel. No obstante, lo darán todo por proteger a los habitantes de las maldades de la malvada Shinra, que hará lo que esté en su mano para acabar con su nueva amenaza pública, Avalancha.
Personajes carismáticos y bien trabajados
Si hay algo que destaca por encima de todo en Final Fantasy VII Remake, quizás sean los personajes. Ya no a nivel principal, sino a un carácter secundario o incluso terciario. Todos los personajes cuentan con nuevas líneas, momentos dedicados al personaje en concreto o incluso alguna que otra misión conjunta. Los desarrolladores han conseguido que el jugador tenga cariño hasta por el personaje más terciario, y con ello me refiero al típico personaje que conoces en profundidad gracias a las misiones secundarias. Pasas tanto tiempo de calidad con esos personajes, que consigue que te creas que existen de verdad. Cada uno tiene sus sentimientos, sus motivaciones en la vida, y da la sensación de que te aprecian de verdad. Incluso puede que acaben siendo tus amigos durante las 40 horas que dura la trama aproximadamente contando el contenido secundario. Si les ocurre lo que sea, por nimio que sea, sentirás tristeza, al igual que alegría cuando descubras que en realidad están bien.
¿Realmente nuestros actos son tan buenos como creemos?
Como bien he mencionado al principio, el grupo principal quiere derrocar a Shinra, para que deje de usar la energía Mako y cesar así el sufrimiento del planeta. Para ello, su objetivo es destruir cada uno de los ocho reactores de Mako esparcidos por Midgar y a la vez dar caza a dicha corporación. Sin embargo, el videojuego sabe mostrar cuales son las consecuencias de dichos actos. No es solo destruirlo y ya está, va mucho más allá. Por ejemplo, en el videojuego original, una vez destruido el reactor te dejaban caer que la gente lo pasaba mal a raíz de ello, pero nada más.
Por otro lado, en Final Fantasy VII Remake puedes observar como al escapar de la explosión, parte de la ciudad ha sido destruida, la gente ha perdido a sus familias y sus casas. Su vida ya no es como la habían conocido hasta ese momento. Puedes ver cómo la gente sufre por algo ajeno a ellos. Todo eso hace reflexionar a los protagonistas sobre si de verdad están haciendo las cosas bien. Y no solo a los protagonistas, tú mismo te replanteas esos actos, y te sientes mal al ver como esa gente sufre por ello. Al fin y al cabo, has sido tú el que ha ayudado a destruir ese reactor. Y es algo muy positivo.
Exploración amena, pero alargada en el tiempo
La exploración de Final Fantasy VII Remake es la misma que en el original, pero con unos cuantos cambios que la adaptan a la generación actual. La velocidad de avance es mayor, hay obstáculos en el camino, que habrá que rodear, pasar por un lado, por debajo o incluso saltar. Todo eso de forma automática, claro. Obviamente, al igual que la historia, el mapa está mucho más expandido, con zonas nuevas, mazmorras extra y un tamaño en general bastante grande.
Sin embargo, existen ocasiones en las que sientes que una mazmorra está en ese lugar para rellenar o alargar el tiempo de juego. Por otra parte, si pensamos en frío la posición de esa mazmorra o nivel y lo comparamos con la vida real, da un resultado diferente y a la par que interesante. Es decir, son mazmorras que para el jugador quizás se hagan pesadas, pero que si dicha situación ocurriese en la vida real, sería normal encontrarnos con mil trabas en el camino como lo son algunas de estas mazmorras. Otra cosa son las mazmorras que te hacen repetir por historia, o dar vueltas sin ton ni son.
Por otro lado, la exploración suele estar muy limitada debido a la historia, además de ser lineal en gran parte del videojuego. No obstante, una vez llegue determinado punto de la historia, aparecerá la tan ansiada libertad. Ese será el momento perfecto para hacer encargos o participar en torneos, entre otras actividades como los minijuegos. La parte mala de esta estructura lineal, es que quizás no puedas volver a hacer dichos eventos una vez avanzada la historia.
No obstante, en su mayoría las misiones son interesantes, y desvelan nuevos datos del ecosistema de la ciudad de Midgar, por lo que merece la pena hacer el esfuerzo de realizarlas para indagar en el pasado y presente del lugar. Además, siempre tendremos nuestra ansiada recompensa, vital para conseguir dinero, ya que los combates no nos darán tanto dinero como desearíamos. Debido a esto, la compra de nuevas armas y accesorios quedará limitada al dinero que podamos conseguir, y elegir destinar ese dinero para objetos curativos como Pociones o Éteres, o en nuevo equipo para fortalecer a los personajes.
Respecto a entablar un combate, en el original se hacía mediante combates aleatorios. Estos rompían la pantalla en pedazos y daban paso a un nuevo escenario de combate. En este videojuego, los enemigos se encuentran en el mismo escenario, y al acercarse a ellos el combate iniciará. Por supuesto, siempre existirá la opción de evitar dichos combates siguiendo hacia el frente.
La acción llega para quedarse, pero con un componente estratégico
No será la primera vez ni la última que se debate acerca de el porqué desaparecieron los turnos de la saga Final Fantasy desde aquel ya algo lejano Final Fantasy XV. Hay quien dice que la razón es porque ya están obsoletos, algo que Persona 5 Royal demuestra que no es cierto. Otros dicen que es para abarcar más público, y quizás tengan razón, al fin y al cabo, los turnos son un poco más de nicho. Pero realmente lo que importa a la hora de vender un juego es si realmente es bueno o no, independientemente de su sistema de combate. No voy a entrar en más detalles, pero hay muchos juegos que lo han demostrado.
Y realmente la jugabilidad de Final Fantasy VII Remake es muy buena, y mucho más dinámica que la del original. Los desarrolladores han conseguido encontrar un sistema de combate equilibrado y que funciona, fusionando la acción a raudales de un videojuego de acción con el componente estratégico de un combate por turnos. Es decir, puedes dirigirte al enemigo atacando sin más, pero si no usas la cabeza y la estrategia, puede que te lleves alguna sorpresilla en forma de GAME OVER.
Sistema de combate
Final Fantasy VII Remake apuesta por una jugabilidad más dirigida a la acción, pero sin olvidar la estrategia pura y dura. Entre el arsenal de ataque, contamos con ataques cuerpo a cuerpo, magias, habilidades, la posibilidad de defenderse, hacer esquivas, usar objetos, límites, etcétera.
Aunque todo esto va a estar limitado con una barra que se recupera del videojuego original, y esta es la famosa barra BTC. Marcada por dos segmentos, esta irá llenándose poco a poco a medida que avanza el combate, aumentando su velocidad si realizamos acciones distintas como el ataque físico. Esto conlleva gestionar los ataques especiales que usamos, ya que si estamos con poca vitalidad y no tenemos esa barra con al menos una porción llena, no podremos curarnos o usar un ataque decisivo, por ejemplo.
Adentrándonos más en el arsenal dispuesto para la batalla que no necesite el uso de la barra BTC, con Cloud contamos con dos tipos de ataques físicos. En primer lugar se encuentra el ataque sagaz, un tipo de ataque físico que se caracteriza por su rapidez, pero cuenta con una fuerza de ataque inferior. En contraparte, queda el ataque fuerte, que al contrario que el anterior, infiere al enemigo más daño, sacrificando parte de la velocidad del ataque sagaz. Habrá que utilizar uno u otro dependiendo del tipo de enemigo al que nos enfrentemos. Además de Cloud, Aeris también cuenta con un ataque básico y uno con un alcance y daño mayores. Respecto a Tifa y Barret, dos de los otros protagonistas, cuentan con un ataque básico, y un ataque especial cada uno. Otras opciones de combate, en este caso más de ámbito general, son la posibilidad de hacer volteretas para esquivar al enemigo, o protegerse de ataques.
Una vez explicadas las opciones de combate más comunes, toca explicar esas otras habilidades o magias que están más limitadas. Entre ellas se encuentran las materias o magias, que se encontrarán o comprarán durante la aventura, y se equipan en las armas y equipo a través de una serie de ranuras. Cada una de estas materias utiliza un segmento de la barra BTC.
Por su parte, las habilidades se obtienen a través de las armas, para conseguirlas hay que equipar el arma en cuestión, y utilizar la habilidad hasta aprenderla. Tras eso, el personaje aprenderá dicha habilidad para siempre, aunque no conserve dicha arma equipada. Así se podrán equipar otras armas para ir aprendiendo nuevas habilidades en el proceso. Estas habilidades usan de uno a dos segmentos de la barra BTC, dependiendo de lo fuerte que sea. Decir que cada una de las armas habitualmente es diferente en aspecto, no en jugabilidad. Para los objetos aplica el mismo sistema, utilizando una barra cada vez que usemos algo del inventario.
Además de toda esta serie de ataques básicos y especiales, hay dos más que están un nivel por encima en cuanto a limitación y potencia. Se trata de los límites y las invocaciones. En el caso de los primeros, existe otra barra de color naranja que se llena a medida que los personajes realizan y reciben daño, y una vez llena podrá canjearse por un ataque especial muy fuerte. Respecto a las invocaciones, suelen aparecer cuando estamos en un estado crítico de salud. En ese momento, aparecerá una barra morada en el lateral de la pantalla, que irá llenándose hasta poder llamar al combate a la invocación deseada. Por supuesto, siempre a cambio de un segmento de la barra BTC. Una vez esté la invocación en el campo de batalla, esta no podrá controlarse directamente, sino que nos ayudará realizando ataques básicos. Además de estos ataques, se le podrán asignar una serie de órdenes para que utilice habilidades especiales, a cambio de segmentos de la barra BTC de cualquier personaje.
Por otro lado, a nivel del suelo el combate funciona muy bien. El problema viene cuando aparecen enemigos voladores. Esto se debe a que el jugador no puede saltar a placer, sino que el personaje salta de forma automática a por el enemigo. El resultado son combates incómodos difíciles de controlar, sobretodo en los momentos en el que el enemigo desaparece del rango de alcance, forzando a retroceder para que este te persiga.
Grandes diseños de personajes acompañados por una banda sonora espectacular
Cuando adaptas un videojuego de 1997 a uno de 2020, es normal recibir una oleada de cambios, sobretodo en lo que respecta al diseño de personajes. Cloud, Tifa, Aeris, Barret o el mismo Red XIII han recibido un cambio que les favorece. Estos presentan diseños coloridos, con atuendos fieles a los originales y adaptados a tiempos modernos. Por otra parte, el diseño de enemigos también ha sido actualizado, y presentan un aspecto más realista. Además, también se han añadido nuevos enemigos para hacer frente a los nuevos escenarios, y no caer en la repetitividad. En cuanto al diseño de escenarios, tienen un nivel alto de detalle y son fieles a los originales, pero pecan de una falta de texturas en ocasiones. Hay un escenario en concreto que tiene fondos borrosos, pero solo es un caso puntual. En general están muy bien cuidados, pero tienen pequeños peros como las texturas mencionadas.
En lo que respecta a la banda sonora, esta incluye multitud de temas nuevos, en su mayoría acertados a la par que buenos. Nobuo Uematsu ha hecho un gran papel componiendo estos nuevos temas, y actualizando los originales. Por ejemplo, ya no suena constantemente el tema de batalla, sino que va intercambiando con otros temas igual de buenos. Las melodías consiguen que te metas de lleno tanto en la historia como en los increíbles combates, por lo que este apartado no puede no ser excelente. Por otro lado, las voces en japonés elegidas para los personajes casan muy bien con su personalidad, y no tengo ninguna pega al respecto. Desde el principio sientes que son uno y en ningún momento chirrían.
Los desarrolladores, los más importantes
Final Fantasy VII Remake tiene un montón de desarrolladores detrás, pero voy a mencionar a los más destacados. En cuanto a la dirección, el director principal es Tetsuya Nomura, mientras que Naoki Hamaguchi lo acompaña en su función como co-director.
Tetsuya Nomura, largamente conocido por su saga de éxito Kingdom Hearts y su videojuego original The World Ends With You, además del diseñador principal en cuanto a Final Fantasy se refiere. Por su parte, Naoki Hamaguchi ha trabajado únicamente en la saga Final Fantasy desde Final Fantasy XII, entre sus roles más importantes destacan Efectos Visuales en FF XII, Programador Principal en Lightning Returns: Final Fantasy XIII y el Líder del Proyecto de Mobius Final Fantasy. Por otro lado, Yoshinori Kitase es el productor del videojuego, se trata de un habitual en este mismo rol tanto en la saga Kingdom Hearts como Final Fantasy.
Respecto al guion, de este se ha encargado Kazushige Nojima, quien además de realizar guiones en la saga Final Fantasy, también tiene varias novelas como On the Way to a Smile en su haber. De las melodías se encarga el mismo Nobuo Uematsu, habitual componiendo la banda sonora de la mayoría de los videojuegos de la saga, así como videojuegos de otras compañías como pueden ser Blue Dragon, Lost Odyssey, Terra Battle o el mismo Granblue Fantasy, entre muchos otros.
Ediciones en España
Final Fantasy VII Remake no ha estado falto de ediciones prácticamente en ningún sitio, y ese es el caso de España. En primer lugar, se encuentra la Edición Estándar, disponible tanto en formato físico como digital, incluyendo distintos extras en función del lugar de reserva. En el siguiente nivel se encuentra la Edición Deluxe, esta además del videojuego, incluye una caja metálica con Sephiroth como protagonista, un CD con una parte de la banda sonora y un libro de arte del videojuego. Por último, y en el más alto nivel en cuanto a precio y contenido, se encuentra la Edición de 1a Clase. La misma incluye el contenido de la Edición Deluxe, además de una Play Arts Kai de Cloud y su moto.
Ediciones a un lado, el videojuego llega en exclusiva a PlayStation 4 de la mano de Koch Media tanto en formato físico como digital. El videojuego incluye textos en castellano, así como la opción de elegir voces en inglés o en japonés. Final Fantasy VII Remake se encuentra a la venta desde el pasado 31 de marzo.
Conclusión
Final Fantasy VII Remake es en realidad una reimaginación del videojuego original. Y como tal lo hace bastante bien. Realmente es una pena que solo abarque una pequeña porción del videojuego original, pero está bien llevado en su mayoría. No obstante, peca en algunas ocasiones de ser alargado de forma excesiva, llegando a aburrir en ocasiones en su primera mitad. Dejando eso a un lado, la historia está muy bien contada, y es muy interesante debido a los pequeños cambios que incluye. No sabes bien que va a pasar aunque hayas jugado al original. Sin entrar en detalles, digamos que hay algunas cosas que han cambiado drásticamente, pero el resultado pinta interesante de cara al futuro.
Historia aparte, la jugabilidad del videojuego es muy entretenida, con un fuerte toque estratégico. Existe variedad de opciones en combate, no cayendo en la repetitividad. Todo eso acompañado de unos diseños de personajes espectaculares, y una banda sonora excelente. Desgraciadamente, no todo podía ser bueno, ya que considero que algunas mazmorras se notan alargadas y hay veces que piensas que sobra contenido. Creo que este remake podría haber sido mucho mejor de haber sido un poco más corto.
En definitiva, creo que a pesar del evidente poco tramo de la historia que cubre, es un videojuego que se sostiene por sí solo. Lo recomiendo a todo aquel fan de la saga, y que quiera redescubrir Final Fantasy VII de una forma diferente a la habitual. En mi caso, no me preocupa que haya cambios de cara a futuros videojuegos, ya que creo que para conocer la misma historia, ya tenemos el original de PlayStation.
Lo mejor:
- Historia muy interesante
- Personajes carismáticos y trabajados
- Gran banda sonora que acompaña en todo momento
- Jugabilidad divertida y variada
Lo peor:
- Duración excesiva
- Combates aéreos regulares
Final Fantasy VII Remake
Plataforma/s: PlayStation 4
Desarrollo: Square Enix
Jugadores: 1
Audio/Textos: Audio en Inglés y Japonés / Textos en Castellano
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