En el ya concluido XXIII Salón del Manga de Barcelona, tuvimos el placer nuevamente de poder charlar con Masao Murayama, animador, productor y fundador del estudio MAPPA. En esta ocasión acudió a Barcelona con productor de En este rincón del mundo, lanzada a la venta por Selecta Visión el pasado 8 de noviembre. Murayama nos desveló detalles sobre la producción y desarrollo de esta película dirigida por Sunao Katabuchi, así como sus próximos proyectos.
Ramen Para Dos: En este rincón del mundo es su último trabajo de animación, la obra está basada en el manga de Fumiyo Kono, ¿cómo trabajan a la hora de adaptar un manga?¿es más o menos difícil que trabajar con un guión original?¿Intervino la autora en la toma de decisiones?
La primera parte de la pregunta depende de tantos factores, de si está basada en una obra original o una obra de manga en este caso. Es muy difícil decir cuál es más fácil de trabajar. Va a depender del director.
Cuando tienes una obra original a parte de adaptar tienes las dificultades de tener que cambiar cosas, porque no siempre se puede trasladar todo lo del manga al anime, ya que la animación tiene un ritmo y unos tempos que hay que respetar. En el caso de tener que hacer una obra completamente original tienes otros problemas. No te puedo decir cual es más fácil o difícil.
Respecto a la autora, Fumiyo Kono fue muy colaborativa a la hora de crear En este rincón del mundo, trabajó estrechamente con el director Sunao Katabuchi. Creo que hicieron un gran trabajo en equipo.
RP2: La película está increíblemente bien documentada en sus paisajes urbanos -que ya no existen- ¿fué duro el proceso de documentación?¿se basaron en documentos antiguos o en su imaginación?
Es una obra con un trabajo de documentación enorme. Cuando entrabas en el estudio de Katabuchi te encontrabas todas las paredes llenas de fotografías y artículos. Sobre todo se documentaron en cosas tan minuciosas como qué tiempo hacía en ese momento en las ciudades Hiroshima y Kure (ciudades donde se desarrolla la historia), así como la dirección en la que soplaba el viento a tal día y hora para poder reproducirlo perfectamente en la película. La calidad en este sentido es indiscutible.
Es más, el director Sunao Katabuchi viajó personalmente entre 20 y 30 veces a Hiroshima y Kure para poder documentarse. Yo mismo le decía que no hacía falta ir tantas veces, pero él cogía el coche para ir allí. Iba en coche y no en shinkasen porque el presupuesto era muy ajustado y la única manera económica era conduciendo él mismo. Yo sólo podía pedirle que no condujera él, sino que alguien le llevara, porque si le ocurría algo entonces no sabrían qué hacer.
Otro ejemplo de lo extremadamente documentada que está la película es que uno de los barrios que aparece en el filme ya no existe, porque quedó completamente arrasado por la bomba atómica. Toda la documentación y fotografías que había se quemaron por el bombardeo. Entonces no teníamos ninguna manera de saber cómo era ese barrio más que hablar con la poca gente que seguía viva y que había conocido aquella época. El señor Katabuchi fue a entrevistarse con estas personas, y muchas de ellas fueron falleciendo durante la producción de la película, así que había que buscar a más personas. Por poner un ejemplo, para saber si las barandillas de un edificio eran de madera o de metal, en un diario de la época se decía que eran de madera pero más adelante descubrían que eran de metal y había que cambiarlo todo.
RP2: En este rincón del mundo trata el tema del bombardeo de Hiroshima y la Segunda Guerra Mundial, un tema que le toca muy de cerca, ya que cuando cayeron aquellas bombas usted tenía tan sólo 4 años. ¿Cómo le afectó aquello?¿cree que su experiencia ha sido volcada de alguna manera en la obra?
Hace ya algunos años estuve involucrado en la película de Hiroshima de Hadashi no Gen, una película que en su momento fue muy importante. Normalmente las películas ambientadas en la II GM narraban la dureza y la tristeza de la guerra. Con En este rincón del mundo quisimos poner el foco en algo diferente, quisimos expresar que incluso en tiempos tan duros de guerra la gente quiere seguir viviendo de la forma más normal posible. La guerra va afectando a la vida, pero la gente procura seguir manteniendo una serie de costumbres. Esto es lo que la diferencia [En este rincón del mundo] del resto de filmes ambientados en la época de la guerra.
Es por ello que tuvimos tantos problemas para conseguir el presupuesto y la financiación. Cuando intentábamos explicar al posible financiador que esta película era así, nos preguntaban si era una película para llorar, nosotros respondíamos que no pretendíamos hacer un filme que hiciera llorar. Era muy complicado explicar a la gente que iba a poner el dinero lo que queríamos hacer, y por eso tuvimos que acudir a buscar dinero a través del crowfunding.
RP2: En una entrevista reciente, en la Japan Expo de París, usted dijo que le gustaría producir un anime del manga “Opus” del fallecido Satoshi Kon. Recientemente el compositor Susumu Hirasawa reveló estar trabajando en uno de los temas principales de dicha adaptación, ¿qué nos puede contar ahora de este proyecto que ya parece más que un deseo y es una realidad?
Si, efectivamente es nuestra intención hacer un anime del manga de Opus. Creo que estoy al final de mi carrera y quiero darle el toque final creando una obra como Opus, de un autor tan destacable como Satoshi Kon.
RP2: Una última pregunta. En una entrevista anterior que le hicimos usted nos comentó que no gustaba que las series actuales contasen sólo con 12 episodios, ya que no permiten desarrollar correctamente el argumento, y sin embargo, muchas de las series que produce su estudio tienen este formato, ¿qué razón hay a esta cuestión?
Si, es verdad que no me gusta las series de esta duración, pero cuando creamos una serie de animación invertimos mucho tiempo en la planificación, diseños de personajes y la definición del mundo en el que se ambienta la historia. Es un trabajo muy grande para digerirlo en tan solo 12 episodios. Cuando empecé en la industria de la animación los contratos eran por un año, es decir, ya sabíamos que íbamos a trabajar durante un año como mínimo en una serie. Más tarde esto cambió y se convirtieron en series de 24 y 26 episodios. Ahora, por una cuestión de evitar riesgos económicos se ha impuesto el formato de 12 episodios. Aun así sigo creyendo que cuanto más tiempo tenga para desarrollar una serie con más episodios, mayores son las posibilidades de conseguir mejores resultados. Pero la economía actual es lo que prima sobre todo lo demás, y lo que la gente quiere es que sus series sean lo más rentables posible, siendo esta duración la manera de reducir riesgos.
RP2: Muchas gracias por su tiempo y por atendernos.
A vosotros.
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