
Por un lado están las licencias de Death Note y Blue Dragon RalΩGrad, que pasarán a Norma Editorial, dos obras que era un secreto prácticamente a voces que pasarían a Norma, puesto que los creadores de Death Note, Takeshi Obata y Tsugumi Ohba, son los mismos que firman una de sus obras más exitosas actualmente Bakuman, algo que sucede también en el caso del dibujante de Blue Dragon RalΩGrad, Takeshi Obata. Además son dos obras cortas y finalizadas, que no engrosarían más la lista de novedades mensuales de Norma, que ya de por si comienza a estar un tanto saturada.
Lo que está por ver es el plan de edición con estas obras, puesto que se desconoce si finalmente Norma ha licenciado solo el manga, o también las novelas y el conocido tomo número 13. Tampoco si editará de nuevo la obra como EDT en formato tankoubon o sacará una nueva edición basada en la Black Edition de Death Note, una edición onimbus de seis tomos dobles con nuevas portadas y algunas páginas a color no incluidas en la edición tankoubon.
La otra obra que según comenta la tienda ya está en manos de Panini Comics es Gantz, el seinen de Hiroya Oku, obra que también muchos apuntaban para Panini, editorial que había publicado otras obras de corte parecido o similar como Biomega o Abara de Tsutomu Nihei. En el caso de Gantz, la obra está aún abierta en Japón con 35 tomos de los cuales 33 han sido editados por EDT en España, aunque parece estar acercándose a su final. Esta licencia también abre algunas incógnitas como es el caso de la novela Gantz Minus, que en teoría ya estaba traducida a nuestro idioma y nunca llegó a publicarse. Ahora que Panini también se ha lanzado a editar novelas con El Caballero Vampiro es posible que veamos Gantz Minus en España.
En cuanto a Bleach, la licencia que desveló este blog hace unos días, otras pistas que apuntaban a que Panini Comics era la dueña de sus derechos es que en Italia ya se encarga de su edición -e incluso también del anime-, país de donde provienen prácticamente todos los mangas editados por Panini en España -sólo hay que leer los créditos de alguno de sus tomos para descubrirlo-, por lo que es posible que de esta manera ahorren en costes y abordar la edición de un manga que lleva 50 tomos ya publicados no sea tan difícil.
Tras estas últimas revelaciones, aún no oficiales ni confirmadas por ninguna de las dos editoriales, quedan en el aire otras licencias confirmadas por Joan Navarro que no quedarán huérfanas pero que aún no se sabe a ciencia cierta a que editorial irán a parar: Rurouni Kenshin, Sidooh y Claymore.
Enlace de interés:
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Fuente: Totcomic
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