Hace menos de dos semanas se celebró en la ciudad brasileña de Sao Paulo, uno de los eventos más importantes y conocidos de América latina: el Anime Friends. El evento albergaría, entre otras cosas, una nueva edición de la International Yamato Cosplay Cup, siendo la tercera en el que España participaría representada por Laura “Sae”, quien se clasificó para ello el pasado mes de marzo en el V Japan Weekend Barcelona.
Durante los meses anteriores ,a través de la red social facebook, la organización del evento (organizado por la empresa Yamato Corporation) informaron de primera mano a los participantes de este año sobre las novedades del certamen. Así como del evento y cualquier duda sobre los viajes y estancias de los mismos. Hubo una excelente comunicación en español, portugués e inglés (debido a que este año también participaba Italia) entre la organización con los cosplayers y sus staffs. La organización permite que los participantes traigan staffs personales con ellos y también miembros del voluntariado del evento si estos fuesen necesarios.
Los participantes estaban citados en la ciudad paulista a lo largo del miércoles 4 de julio, y la mayoría de los mismos llegaron por la mañana al aeropuerto de Guarulhos. La organización, encabezada por Fernando “Ferio”, máximo enlace entre el evento y los cosplayers, estaba esperando la llegada de los participantes, para luego desplazarlos en autobús privado al hotel. Ya allí se compartían habitaciones los próximos días. Un dato curioso es que las normas de la organización prohíbe a los participantes dormir en las mismas habitaciones que sus staffs/acompañantes durante los días del concurso.
Durante el primer día, a falta de la llegada de la representante Argentina y el de Ecuador esa misma noche, fue prácticamente libre para todo el mundo, en el que se pudo visitar y hacer compras por el barrio japonés de Sao Paulo, donde estaba el hotel. Sin duda es digno de ver, ya que la colonia japonesa en la ciudad es la más grande que hay fuera del país nipón. Las calles están adornadas con farolillos / farolas orientales y había numerosas galerías comerciales con productos de alimentación típicos japoneses y también cómo no, relacionados con el anime y el manga. También se hizo una visita a la sede de la empresa Yamato, organizadora entre otras muchas cosas de este evento, en el que los finalistas recibieron sus camisetas identificativas.
Con la llegada de la representante Argentina y el de Ecuador a última hora de la tarde, se completó el grupo y los finalistas acudieron a una reunión privada con los responsables del concurso para conocer los últimos detalles del mismo. Tuvieron la oportunidad de presentarse y conocerse un poco mejor entre ellos. Por último, se realizó el sorteo de orden de participación y se citaron en verse la mañana siguiente a las 8 de la mañana para partir al evento a esa misma hora.
Tras el desayuno, los participantes, los staffs y los voluminosos equipajes / atrezzos, pusieron rumbo en autobús hacia la Facultad Cantareira, lugar elegido este año para albergar el evento. Una vez allí, los participantes se dirigieron a una zona privada dentro del pabellón donde se encontraba el escenario (muy grande y espacioso) y la misma tenía amplitud suficiente para colocar sus pertenencias así como dos vestuarios para poder cambiarse llegado el momento. Este pabellón estaba separado del resto con una puerta corrediza vigilada. Con ligero retraso debido al ensayo de un grupo musical invitado al evento, empezaron los ensayos, salvo excepciones, en riguroso orden de participación y una vez acabados (sobre las 2 de la tarde) fue cuando las puertas del pabellón se abrieron al público, congregado hasta entonces en el resto de instalaciones del evento.
Aunque esto pudiera significar que podría llegar un momento de paz para los participantes, no se dió el caso, ya que la gente siguió montando sus atrezzos (algunos incluso llevaban toda la mañana haciéndolos allí mismo) y también a empezar a vestir sus cosplays con vistas a la sesión de fotos programada antes del concurso.
Aquí ya se pudo ver que la mayoría de los cosplayers venía a darlo todo con grandes atrezzos para las actuaciones. Recordemos que salvo Brasil, los países de latinoamérica no tienen plaza en concursos más importantes como el World Cosplay Summit, y debido a ello este sea el concurso más importante a nivel internacional en el que un cosplayer de allí puede participar. La mayoría tenía alguna sorpresa bajo la manga como pudimos ver en los ensayos.
Antes de la sesión de fotos llegó el momento en que el jurado (sin ningún tipo de vínculo personal aparente como cosplayers) ocupó una de las salas y empezó la revisión a los cosplayers y sus dossieres, donde se pudo comprobar una de las grandes diferencias con Europa, y es aunque hicieron a los participarse girar sobre sí mismos y posar para compararles con las imágenes de los dossieres, no se acercaron a menos de metro y medio de los cosplays (salvo con Perú, ya que este no entraba en la sala debido a sus alas) y ni mucho menos pudieron tocarlos y revisarlos minuciosamente con sus manos. De esto hablaremos al final del artículo.
Una vez finalizada la revisión, llegó el momento en que los participantes desfilaron en el escenario ante el público como preludio del inicio del concurso, el cual empezó con casi una hora de retraso al horario previsto. Llamó la atención el poquísimo público que había asistiendo a esta final, que no pasarían de las 100-150 personas, y que probablemente fuese debido a que era un jueves, y como tal un día bastante malo para la celebración de un concurso de esta envergadura. Desde Ramen Para Dos intentamos por todos los medios ofrecer el concurso en directo vía streaming, pero la organización carecía de una red wifi propia con suficiente alcance para que llegase hasta el escenario y así facilitarnos la emisión.
Empezando por Chile y terminando por Perú, los participantes fueron subiendo uno a uno al escenario para representar sus actuaciones tradicionales. Recordamos que uno de los rasgos más propios de esta International Yamato Cosplay Cup es que la misma se divide en dos: una actuación tradicional y otra libre donde se suelen realizar parodias y escenas cómicas y originales de sus personajes. Los participantes contaban si lo deseaban con la ayuda de todos los staffs que necesitasen para realizar correctamente sus actuaciones, así como el apoyo del video para las mismas.
De estas actuaciones individuales recordaremos (por poneros solo unos pocos ejemplos) grandes y bonitos atrezzos como los de Argentina, grandes interpretaciones como las de Brasil o España (cantando en directo) e incluso vimos a Laia de Uruguay volar gracias a un elaborado sistema de palancas (¡que cabía en una maleta!). Los cosplays habían también muy buenos y puestos a mojarme los que más me gustaron en confección fueron los de Argentina, Italia, Chile y España.
En apenas una hora ya habían actuado todos los participantes del concurso, y tras dejar sus pertenencias cerradas con llave en la zona cosplayer acotada del evento, llegó el autobús que nos puso a todos rumbo de nuevo al hotel, donde con apenas pocos minutos de descanso, nos habían citado a todos para ir a cenar a un restaurante/karaoke japonés situado a pocas calles. La verdad que por un lado el restaurante era muy bueno, y se vivieron grandes momentos cenando y cantando en el karaoke. Sin duda de los mejores recuerdos de esta convivencia.
A las 9 de la mañana del día siguiente la expedición cosplayer partió del hotel, más relajada, por un lado por haber podido dormir una hora más que el día anterior y sobre todo, por haber aparcado los nervios de la actuación tradicional, afrontando la libre sin pudor ni vergüenza, con la clara premisa de pasarlo bien y compartir risas entre todos.
A diferencia del día anterior, los ensayos fueron puntuales y rápidos y antes del mediodía los participantes disfrutarían de toda la tarde libre hasta las 6 de la tarde que habría una nueva sesión de fotos. Durante este tiempo se pudo visitar con tranquilidad todo el evento, que al principio se nos antojaba pequeño al estar celebrándose en una facultad, pero según íbamos descubriendo salas y pabellones descubrimos lo equivocada que era esta visión del mismo. Pudimos ver salas y recintos para todo, y un gran número de puestos de comida variada, siendo esto la principal diferencia con los eventos que acostumbramos a ver en nuestro país. Pero sobre el evento tendréis un post específico en los próximos días.
Una vez acabado el descanso, los cosplayers se enfundaron sus trajes y se prepararon para una nueva sesión de fotos, atender entrevistas para televisión y para subir al escenario a actuar por última vez. De una manera muy precipitada empezaron las actuaciones libres, que como nos había indicado la organización es “la que más peso ejerce sobre el jurado para su valoración general del concurso”. Ante un número bastante superior de público que el día anterior, se pudo ver un poco de todo, desde guiños al país brasileño por parte de Uruguay y Colombia, la parodia de una escena clásica de los dibujos de la Warner por parte de Argentina, el ya habitual salero de Marcos el brasileño, al Caín peruano visitando Namek por error o a nuestra bruja Sae convertida en Gremlin.
Tras esto la suerte estaba ya echada y en apenas unos minutos se anunciarían los premios de este año. Justo antes de la entrega de premios y tras una nueva sesión de fotos grupal, casi todos los participantes (casi, porque alguno faltaba) se unieron en un corrillo detrás del escenario para desearse suerte y celebrar ante todo el haberse conocido y haber hecho un gran grupo durante estos 3 días. Pero no había tiempo para más y los presentadores fueron presentando a los concursantes uno a uno hasta que los once se reunieron encima del escenario donde se repartieron los siguientes premios:
Mejor interpretación:
- Tercer puesto: Cuádruple empate entre Argentina, Uruguay, Ecuador y Perú.
- Segundo puesto: Bolivia.
- Primer puesto: Brasil.
Mejor confección: Perú.
Mejor Libre: Bolivia
General:
- Tercer premio: Argentina
- Segundo premio: Bolivia.
- Ganador general: Perú.
Con esto se confirmaba que Perú ganaba por segundo año consecutivo la Yamato Cosplay Cup y la organización desvelaba la gran sorpresa que era un premio de un cheque de 1500 dólares para el ganador. Todo el escenario era una piña para felicitar al ganador con sonoros aplausos por parte de la organización, de los participantes y del público.
Y con esto solo quedaba recoger todo y poner rumbo al hotel, donde nos esperaría una cena de despedida en el restaurante contiguo al mismo con las correspondientes cervezas posteriores. Los participantes que regresaban a sus países el domingo estaban citados a las 8 de la mañana para poner rumbo al aeropuerto (algunos tuvieron desgraciadamente problemas con sus vuelos), pero quienes se quedaron durante el sábado pudieron seguir disfrutando del evento o por el contrario dar una vuelta por la ciudad de Sao Paulo. Finalmente el grupo se disolvió del todo el domingo por la noche tras una última cena en el barrio de Liberdade, y con ello una nueva edición de la International Yamato Cosplay Cup.
Se pueden sacar muchas conclusiones sobre este certamen y todo lo que gira a su alrededor. Estas son las mías:
Como se podía preveer, la Yamato en Brasil es un gran ejercicio de convivencia, donde aparte de conocer a nuevos cosplayers y nuevas culturas, te lo pasas muy bien y compartes con tus compañeros cosplayers y staffs grandes momentos que difícilmente se podrán olvidar. Todo esto acompañado de un trato exquisito por parte de los organizadores, que están todo el rato pendientes de que no les falte de nada a los cosplayers dentro y fuera del evento. Este viaje tan largo, y una muy bonita experiencia ha de considerarse ya de por sí un gran premio para aquel cosplayer que gane una plaza en esta final internacional.
Otro tema es el certamen en sí, al cual se le puede achacar diversas carencias, aunque a lo mejor no es “carencia” el término adecuado, existen unas visibles diferencias con el modelo de concurso que hay en Europa. Cierto es que es un concurso que se hace en sudamérica y los criterios y maneras de hacer las cosas son las que ellos mantienen por costumbre allí, pero no quita que esto a la gente que viene de Europa (acostumbrados a otro modelo de certámenes) choque un poco o resulte extraño.
Podríamos poner algún ejemplo como que el jurado no sea compuesto por al menos gran parte de cosplayers en el mismo o que no haga revisiones de cerca de los cosplays, cuando aquí lo normal ya no es que te lo examinen a metro y medio de distancia, sino que se acerquen a ver de cerca y palpar con sus propias manos el trabajo que en muchos casos tanto ha costado hacer al cosplayer.
También sus criterios son diferentes en casi todos los aspectos. Cosas difícilmente valorables en Europa, allí lo son mucho, así que es difícil poder adaptarse al modelo americano/brasileño. En Europa actuaciones que se desarrollan casi al completo por 3 o 4 miembros del staff, visibles en todo momento de la misma, es muy complicado (por no decir imposible) que se valore tan positivamente.
Allí ya no solo están acostumbrados a actuaciones de muchos diálogos, sino que quizá busquen entretener a cualquier precio. Da igual que hagas un traje muy espectacular que lo importante va a ser que entretengas a toda costa, ya lo hagas con un atrezzo de mejor o peor calidad, o que sean méritos tuyos o de tus ilimitados staffs. Puedes hacerte/comprarte un cosplay (o parte del mismo) muy sencillo, si consigues entretener a la gente, es lo que realmente cuenta. Prueba de ello quizá sea también la actuación libre la que más valoren a la hora de tomar una decisión.
Con la interpretación podríamos decir algo parecido, ya que es un poco lotería, dependiendo el año y los jueces que hayan, pero no deja de ser igualmente llamativo.
Desde Europa quizá no se pueda o deba hacer nada, ya que no olvidemos que es un concurso desarrollado en Brasil, pero quizá sí podría haber un poco de adaptación ya sea nuestra o mutua. Un representante de la filial europea (al igual que lo hay de otras filiales sudamericanas) dentro del jurado para, al menos, dejar claro algunos de los criterios o puntos de vista, sería un punto positivo. De esta manera tendrán en cuenta o conocimientos de detalles que se tienen por aquí en los concursos.
Y también sería bueno intentar adaptar la filial en España al modelo brasileño (como se ha hecho en Italia), con una final en la que hubiesen tanto la actuación tradicional como la actuación libre y que esta última sea la que tuviera más peso. No es que la actual Yamato Cosplay Cup en España no se realice correctamente (todo lo contrario, ya que se siguen los criterios que se tienen aquí) pero al haber una tan notoria diferencia entre la final española con la internacional, quizá lo más positivo para los cosplayers sería adaptarse lo antes posible a este modelo.
En definitiva, es un premio muy importante para nuestros cosplayers vivir y participar en la final internacional y representar a nuestro país, pero sin restarle valor, también sería positivo un acercamiento entre culturas y métodos en concursos de cosplay, ya sea del modelo americano al nuestro o, quizá lo más sencillo y eficaz, del nuestro al suyo, con una Yamato Cosplay Cup española “a la brasileña”.
Por último compartimos este interesante video realizado por la representante uruguaya, Laia Bee, que narra fielmente lo que fueron los tres días que duro esta final.
- 1º – Perú
- 2º – Bolivia
- 3º – Argentina
- 4º – Brasil
- 5º – Ecuador
- 6º – Uruguay
- 7º – Colombia
- 8º – España
- 9º – Italia
- 10º – Chile
- 11º – Paraguay
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