Crónica Salón del Manga Cádiz 2012

Como cada año, se viene celebrando en la ciudad de Cádiz uno de los salones del manga que aumenta su público edición tras edición. Ramen Para Dos estuvo presente el sábado, el día que más asistencia de público tuvo. Un sol que brillaba en las sonrisas de los asistentes y las ganas de pasarlo bien son lo que pudimos encontrar principalmente en esta jornada.

Esta ha sido la VII Edición del Salón, y contó, como cada año, con actividades para todos los gustos: Karaoke, escritura japonesa, videojuegos, torneos, juegos de rol, talleres de manga, cosplay etc. Pero lo que más llama la atención de este salón es, sin duda, su alegría y las ganas de hacer, por parte de los voluntarios, un salón muy familiar y que contó con entrada gratuita los tres días del evento.

La primera parte del salón, que es la que vemos nada más entrar, disponía de un punto de información para apuntarse a los diferentes concursos e informarse de las distintas actividades. También estaba situada la zona de Nintendo, donde se pudieron probar diferentes demos y participar en competiciones.

La zona central del patio era donde más actividad había, pues en ella se encontraba el escenario que siempre estaba lleno de actividades. En todo momento parecía que estábamos en un concierto de algún cantante de pop famoso por la asistencia de público.

Todos los concursos de karaoke, cosplay y estilo libre, se disputaban en este escenario, donde el famoso tema musical de PSY, Gangnam Style, no paraba de sonar. Todo el mundo empezaba a correr para dar botes al ritmo de la canción. Sin duda las ganas de participación fueron enormes.

Un punto negativo: al ser un sitio al aire libre y con sol, había muy pocos sitios con sombra, por lo que todos los asistentes disfrazados sudaban a más no poder, lo que repercutió en el maquillaje de los mismos.

En el patio también se podía encontrar la cafetería, con unos precios la mar de asequibles y con unos bocadillos de jamón que quitaban el sentido. No faltaba el ramen y alguna que otra bebida japonesa a modo de refresco.

Pasando a otra zona del salón encontramos todas las tiendas, llegando a la docena, con muchos cómics en liquidación, muchas chapas de grupos de K-Pop y series de animación, merchandising, etc. Los precios no se podían decir que fuesen asequibles, pero se podía encontrar alguna que otra ganga.

Lo único negativo en esta parte del salón fue, sin duda, el tremendo calor y el mal olor que se tenía que aguantar, pues esta parte del salón era cerrada y no contaba con ningún tipo de acondicionamiento. Los trabajadores de las tiendas no paraban de mover sus abanicos y se refrescaban como podían.

Los cuartos de baño del salón, muy pequeños para albergar a tanta gente, no se encontraban para nada limpios, restando un punto a este genial salón. El olor que salía de ellos llegaba incluso hasta el escenario, que se encontraba pegado a los mismos. Para otras ediciones esto es un punto muy importante a arreglar.

Pasando a la última zona del salón, que se encontraba junto la cafetería, encontramos una zona bastante mal organizada pero eso sí, llena de actividades. Aquí se daban cita los juegos de rol, escritura japonesa, taller de dibujo, etc. Estas actividades siempre estaban llenas de gente y quien se acercaba a preguntar por ellas era animado a participar. Un 10 por los colaboradores.

A lo largo del salón no faltaron los colaboradores que informaban en todo momento de las actividades a realizar, acercándose hacia las personas y animándolas a participar en todos los eventos.

La seguridad del recinto era máxima, en cada esquina del recinto había una persona encargada de la misma, vigilando los altercados que se pudiesen originar. En estos eventos es bien conocida la tranquilidad y el respeto que reside en ellos.

Lo Mejor

Sin duda la alegría que desprende este salón hacen que las horas se pasen volando y tengas ganas de participar en todas sus actividades gracias a la iniciativa de los colaboradores. No pagar entrada, algo muy de agradecer en estos tiempos de crisis.

Lo peor

Pocos sitios con sombra, la zona de tiendas y su calor inmenso y mal olor. El sonido del escenario no era de muy buena calidad y apenas se oía al presentador.

No se puede decir que el salón del manga de Cádiz sea un sitio idóneo para la presentación de novedades etc., pero lo que sí podemos decir es que nos encontramos ante un evento más familiar, casi de colegueo con gente desconocida. El acierto de la entrada gratuita no hacía más que animar a entrar a todo el mundo, por lo que muchas familias se acercaban a ver qué es lo que pasaba dentro.

Con muchas ganas de participación por parte de los colaboradores y de los asistentes, salimos de este salón del manga de Cádiz, que si bien tiene que mejorar algún que otro aspecto,con una sonrisa de oreja a oreja esperando al próximo año para volver con ganas de más.