El pasado 2,3 y 4 de marzo se celebró en el IFECA la XXI edición del Salón del Manga de Jerez. Este evento, organizado por la empresa JakeMate Eventos S.L., cuenta con dos citas al año: el primero la llamada edición de primavera y la segunda, la edición de otoño.
El Salón Manga de Jerez es un evento que en los últimos años ha ido retomando popularidad entre todos los seguidores del anime y manga del sur de España. La idea de entrelazar este primer evento con la GamerCon y así juntar a los seguidores de ambas aficiones en un solo escenario ha resultado ser un tándem de lo más exitoso.
Respecto a los invitados, la mayoría de ellos se formaban por cosplayers de nivel nacional, quizás la asistencia de algún autor o director relacionado con la industria habría sido uno de sus puntos fuertes, una asignatura pendiente que les queda a los organizadores. Sin embargo, siguen renovándose cada año y reinventándose un poco más, algo que se ve reflejado en la asistencia y entradas, las cuales se agotaron totalmente para el sábado. Saben que el fenómeno actual atrae cada año a más asistentes, cuya media de edad es marcadamente juvenil, y saben cómo enfocar esta situación.
Según se va acercando la fecha del evento vamos sabiendo que diversas editoriales como Ivrea, Panini y Milky Way Ediciones, Norma y distribuidoras como Selecta Visión tampoco asistirán al evento. Éstas ausencias restan bastante categoría a un evento que parte con la idea de promocionar aún más la cultura del manga y el anime en España. Además esto también dificulta que buena parte del público asistente pueda hacer sus correspondientes compras. Al menos Planeta sí estaba presente.
El sábado por la tarde pudimos ver un recinto con bastante público, adolescente en su mayoría y casi en su totalidad con su correspondiente cosplay. En el interior pudimos ver varios puestos con diferentes tipos de merchan (Snacks japoneses, figuras, posters, pulseras, etc), además del típico escenario con karaoke.
En cuanto a los videojuegos, ámbito en el cual también hace referencia el evento, destacaba especialmente el escenario para torneos de League of Legends o Hearthstone. Además pudimos disfrutar de diferentes stands con videojuegos como Dragon Ball FighterZ o los clásicos Tekken, Mortal Kombat o Street Fighter.
Por otra parte, el Artist Alley, donde diversos autores mostraban sus excelentes trabajos de ilustración, bocetos, pegatinas, marcapáginas etc, tuvo una gran afluencia de personas durante los tres días del evento.
Una de las exposiciones que más personas congregó fue la ExPOPsición, donde se podían encontrar todo tipo de Funko POP basados en los animes y mangas más conocidos (como Dragon Ball, One Piece, Naruto, etc) y de sagas cinematográficas como Star Wars o El Señorde los Anillos.
Una de las actividades que más personas congregó fue el altar de bodas frikis. Era además la primera vez que se hacía una actividad de este tipo en un evento otaku. En él acudían todo tipo de parejas para contraer matrimonio, se pronunciaban los votos y una persona “formalizaba” la ceremonia concluyendo con el clásico “podéis besaros”, posteriormente se hacían una foto que más tarde se podría obtener de manera gratuita.
La sensación general que da esta edición es que cumple con las expectativas puestas en ella, aunque tiene algunos “peros”. Se ha echado en falta la presencia de algún mangaka o director/animador japonés, mayor presencia editorial y de distribución que ofreciera lo que realmente busca el aficionado a esta temática: oferta de manga y anime, y alguna conferencia interesante que realmente sirva para conocer más aspectos del cómic y animación oriental.
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