Últimamente, mires la página que mires de manga y anime hay un elemento común: titanes. Desde su creación, el manga de Ataque a los titanes lo ha invadido todo, convirtiéndose en una de las obras más exitosas de los últimos tiempos. ¿Moda pasajera u obra maestra? Lo que nadie duda es que la obra de Hajime Isayama es un manga irrepetible.
El mangaka debutó con Ataque a los titanes en las páginas de la Bessatsu Shonen Magazine de Kodansha en el año 2009. Los primeros capítulos de la obra lo convirtieron en un éxito casi inmediato y, a día de hoy, acumula 17 tomos recopilatorios y cuenta con más de 20 millones de ejemplares vendidos solo en Japón.
Este éxito se ha reflejado en una adaptación a serie de anime por parte de Production I.G. y Wit Studio, dos películas live-action, videojuegos, novelas, spin-offs… A esto hay que sumar una larga lista de merchandising de los más variado convirtiendo a la franquicia en un auténtico fenómeno de masas.
Sin embargo, al igual que tienen una larga comunidad de fans, no son pocos los que critican la serie. Lenta, dibujo pobre…, son algunos de los argumentos de los detractores del manga. Pero, ¿están infundados o la serie merece tal fama?
Un mundo épicamente original
La historia sitúa al lector en un mundo futuro en el que la humanidad se ve recluida detrás de unos muros para estar a salvo de los titanes. Estos son unos seres descomunales que prácticamente han acabado con la raza humana situándoles al borde de la extinción. El joven Eren Jaeger, tras vivir en sus propias carnes el sadismo de una de estas bestias, ha decidido inscribirse en el cuerpo de exploración para cumplir su sueño: acabar con los titanes y liberar a la humanidad.
Algo que nadie puede negar es la originalidad y el atractivo de la historia. Un mundo postapocalíptico, los titanes, las armas contras estos, la sociedad en la que se estructura la humanidad, los diferentes ejércitos… Todo ello sazonado con los temas habituales en este tipo de historias distópicas: el egoísmo humano, existencialismo, etc. Por otro lado, como buen shônen también se exalta la amistad, dando cabida también al humor.
Además, la historia no se reduce solamente a luchar contras los titanes. Según van avanzando los capítulos, el enfrentamiento queda apartado a un segundo plano, centrándose en el conflicto humano. Aunque es cierto que en el momento en que se deja de lado el combate directo, ya sea entre titanes o humanos, el manga adquiere un ritmo lento de continuo diálogo y donde uno tiene la sensación que resulta un tanto redundante.
Adicionalmente, la originalidad del mundo contribuye a los sorprendentes giros de guión de la historia. Aunque estos es cierto que a veces resultan un tanto artificiales y poco creíbles, lo que puede llegar a echar por tierra las teorías del lector.
Una tropa única
Como buen shônen, Ataque a los titanes posee un amplio elenco de personajes principales que tratan de ayudar al protagonista a alcanzar su destino. Esto unido a los misteriosos titanes y el resto de personajes que irán desfilando por las viñetas, estamos ante uno de los puntos fuertes del manga.
No obstante, Eren se trata del típico protagonista de shônen: con una férrea voluntad de alcanzar sus objetivos y con un poder único. Sin embargo, se trata de esos personajes de shônen que puede resultar un tanto cargante al ser demasiado pasional. Siempre gritando, nunca entrando en razón… Junto a él están Mikasa, la misteriosa y poderosa amiga de Eren y que siente algo más que amistad por él, y el sabio Armin, cuyo intelecto supera toda lógica. Tanto es así que algunos de los giros de la historia resultan algo forzados.
Por si estos fueran pocos, los personajes del resto de la compañía no se quedan atrás. Aunque muchos están sacados de puros tópicos del género, otros poseen un carisma sin igual. Ejemplo de esto son Sasha, Jean, Annie, Reiner, Conny… A estos habría que añadir el resto de personajes del ejército como Erwin y, sobre todo, Levi uno de los más queridos de la franquicia. Además, alguno de ellos posee cierto aura de misterio que los hacen cada vez más atractivos según avanza la trama.
Pero sin duda otro de los elementos innovadores de la serie son los titanes. Aunque bien pueden ser una mezcla entre zombies y los monstruos gigantescos del género tokusatsu, poseen una naturaleza y forma de actuar que los hacen únicos. Aunque como se podrá ver más adelante en el manga, son algo más que simples monstruos.
El dibujo, ¿el gran “pero” del manga?
Este es quizás uno de los aspectos más polémicos del manga y que ha provocado el rechazo de muchos lectores. Y es que la verdad hay un gran contraste entre lo que promete la historia y el dibujo.
Ataque a los titanes posee un dibujo tosco, casi abocetado, y totalmente plano. Esto genera un estatismo que no contribuye mucho al dinamismo, sobre todo en los densos diálogos.
Además, los cuerpos resultan totalmente rígidos y artificiales, muchas veces desproporcionados. Además, los personajes pueden llegar a confundirse con facilidad dado que mantienen una serie de rasgos semejantes. El único diseño que sobresale de todos es Mikasa.
Sin embargo, donde de verdad se luce el autor son en las escenas de acción. A pesar de las carencias del dibujo, logra recrear escenas totalmente ágiles, donde la desproporción y las toscas líneas de movimiento trasladan a la perfección la intensidad del combate.
A esto hay que añadir el cuidado trato de los fondos, que contrasta mucho con los personajes y, sin duda los titanes. Es más, el dibujo contribuye a otorgarles una ferocidad y potencia abrumadoras, además de esa eterna sonrisa que tienen algunos, quizás los más temibles.
Sobre el autor
Hajime Isayama nació el 29 de agosto en Oyama, en la prefectura de Oita, Japón. Ya en la guardería se distraía en clase pintando dinosaurios. Nadie podía esperar que esos inocentes dibujos del niño acabarían desencadenando una de las obras más populares de los últimos tiempos.
Después de licenciarse en el instituto se matriculó en la Kyushu Designer Gakuin, donde profundizó en el diseño artístico. Tras finalizar sus estudios se trasladó a Japón a probar suerte con el manga.
En 2006 presentó su primera obra titulada Ataque a los titanes al Magazine Grand Prix de Kodansha, donde se hizo con el premio a la “Mejor obra”. Más adelante comenzaría a serializarla en 2009 en las páginas de la revista Bessatssu Shonen Magazine, convirtiéndose en uno de los buques insignia de la editorial, llegando a salvarla económicamente.
Cabe destacar que, en un principio, había presentado su trabajo a Shueisha con la intención de que se publicara en la Weekly Shonen Jump. La editorial le dijo que si quería publicar la obra en sus páginas tenía que modificar su estilo de dibujo y la historia para adecuarlo al tono de la revista, algo a lo que el autor se negó rotundamente. En cambio, Kodansha apostó por él desde el primer minuto.
A día de hoy, el manga cuenta con 17 volúmenes recopilatorios en el mercado japonés, acumulando más de 20 millones de ejemplares vendidos solo en Japón. Además, cuenta con multitud de adaptaciones a otros medios, lo que la confirma como la obra más exitosa del momento. Incluso Sony parece haber comprado los derechos para trasladar la invasión titánica a Hollywood.
El autor también ha participado en los diversos spin-off de la obra como Ataque a los titanes: Antes de la caída, Ataque a los titanes: No Regrets, Ataque a los titanes: Junior High, Ataque a los titanes: Lost Girls y Ataque a los titanes: Kakuzetsu Toshi no Joou. También ha estado presente en las adaptaciónes animadas por parte de Production I.G. y Wit Studio, y en los recientes live-action.
El manga ha llegado a España de la mano de Norma Editorial. Además, también han licenciado Ataque a los titanes: Antes de la caída, Ataque a los titanes: No Regrets y Ataque a los titanes Inside, la guía de lectura. Aunque viendo el éxito de la obra, lo más probable es que estas no sean las única obras de la franquicia que se editen aquí.
En cuanto al anime, tanto la serie, Ataque a los titanes, como las películas, Ataque a los Titanes: La Película – Parte 1. El arco y la flecha y Ataque a los Titanes: La Película – Parte 2. Las Alas de la Libertad han llegado a España de la mano de Selecta Visión. Recientemente, han estrenado en su canal de Youtube la parodia Ataque a los titanes: Junior High, que se estrenó esta temporada de otoño. En cuanto a los live-action, Media 3 es quién tiene los derechos de distribución en nuestro país.
A todas estas adaptaciones hay que sumar todo tipo de merchandising, de lo más variado y que ha contribuido a convertir a la obra en un auténtico fenómeno social
Aunque el autor también ha presentado otros trabajos a varios concursos como Orz en 2008, ha sido Ataque a los titanes lo que la catapultado a la fama. Solo queda esperar a ver cómo finaliza la obra para comprobar si se quedará en una moda pasajera o pasará a la historia. De momento, el autor confirmó que tendría en torno a veinte tomos, así que el desenlace parece estar cerca.
Sobre la edición
Ataque a los titanes está editado en el formato habitual de tomo tankobon de Norma, es decir, en formato rústica con sobrecubierta, 10,7 x 17,5. Además respeta tanto la portada como la tipografía de la edición japonesa a excepción del título que está traducido.
Además, en los primeros tomos se mantiene al final de cada capítulo información interesante para comprender el mundo de la obra, el funcionamiento de las armas de la humanidad, las diferentes divisiones del ejército de la humanidad contra los titanes… Todo en versión esquemática y bastante bien explicado. Más adelante, en las primeras páginas del tomo se recoge un resumen de la historia previa al tomo, así como los personajes que han aparecido.
La traducción resulta bastante correcta, a excepción de los primeros capítulos que se tradujo a Levi como «Rivaille». Además, hay un pack que incluye los dos primeros tomos junto a un cofre, una buena forma de iniciarse en el mundo de Ataque a los titanes.
En conclusión
Sin duda estamos ante una de las obras más exitosas de los último tiempos, a pesar de las críticas. El joven Hajime Isayama ha creado una historia que se desarrolla en un universo atractivo y con sus propias normas que obligará al lector a zambullirse en él desde las primeras páginas.
Un futuro post-apocalíptico, unas bestias feroces, una sociedad clasista y despiadada… La historia tiene todos los ingredientes de las grandes historias y protagonizados por personajes valerosos y carismáticos capaces de luchar por la humanidad hasta el último aliento. No solo se trata de un mero combate contra los titanes, sino que es algo más. Aunque es cierto que en ciertos momentos puede resultar un tanto pesada y redundante.
Si bien es cierto que el dibujo puede desencantar a una amplia mayoría, algo que el autor ha reconocido más de una vez, las peleas trasladan esa agilidad y velocidad de los titanes y los humanos sobre las maniobras tridimensionales. Es más, a pesar de su tosquedad más de uno no puede imaginarse la obra sin ese dibujo.
Aunque todavía resulta imposible afirmar si estamos ante una obra maestra o no, lo que sí es cierto es que Ataque a los titanes tiene los mimbres de las buenas historias. Una obra que sin duda todo el mundo debería darle una oportunidad. Al menos para entender uno de los fenómenos sociales más importantes de los últimos tiempos.
Lo mejor
- El universo creado por Hajime Isayama.
- Las escenas de acción.
Lo peor
- El dibujo tosco y que puede llegar a desencantar.
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