Sinopsis
Natsu Dragneel y sus amigos viajan a la isla Reino de Stella, donde se revelarán secretos oscuros, tendrán que enfrentarse a nuevos enemigos y, una vez más, deberán salvar al mundo de la destrucción absoluta.
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Reseñas
Los dragones son, probablemente, los seres mitológicos más populares y que más pasiones despiertan. En un mundo de fantasía, tan amplio como el de Fairy Tail, estas criaturas no podían faltar en él. Estos se han convertido en uno de los puntos principales de la serie, guardando muchos misterios relacionados con los protagonistas, argumento que no han dudado en explotar en la segunda película de la franquicia Fairy Tail: Dragon Cry.
Al igual que con la serie de animación y la primera película Fairy Tail: La Sacerdotisa del Fénix, Selecta Visión decidió hacerse con los derechos del nuevo producto de esta franquicia, la cual cuenta con numerosos fans. La distribuidora proyectó la cinta en un evento especial en los cines españoles el pasado 1 de marzo para, después, sacarla en formato físico tanto en DVD como en Blu-ray. En Ramen para Dos hemos podido verla por fin en su edición en DVD y la película tiene mucha tela que cortar.
Festival del despropósito
El equipo más fuerte de Fairy Tail, formado por Natsu, Lucy, Erza, Gray y Wendy, recibe el encargo de recuperar el bastón mágico conocido como Dragon Cry, del que se dice que contiene la ira de los dragones y posee el poder mágico de aniquilar un imperio entero. Éste ha sido robado de un templo del Reino de Fiore por el traidor Zash Caine acabando en manos del Rey de Stella. Natsu y compañía viajan hasta el Reino de Stella con la intención de recuperarlo. Una vez allí, conocen a Sonya, una joven maga ayudante del Rey Animus, que decide ayudarles por motivos desconocidos y parece esconder un terrible secreto. El equipo formado por Natsu y los miembros de Fairy Tail Gajeel, Juvia y Levy, quienes casualmente también se encuentran en el Reino de Stella completando una misión, se verán envueltos en una batalla por el Dragon Cry, en la que Natsu muestra por primera vez su verdadera forma.
Antes de comenzar a explicar en detalle en qué falla el filme, creo que es importante hacer una pequeña aclaración sobre la línea temporal de esta historia. Para aquellos que no sigan el manga, pero estén al día con el anime, la película está claramente situada tras la separación del gremio de Fairy Tail al final del Arco de Tártaros y con el que acabó la serie hasta la próxima temporada, planeada para este mismo año. Por eso, que más de uno no se asuste al ver la transformación de cierto personaje al más puro estilo Sailor Moon, ya que esa parte todavía no ha sido animada en la serie.
Volviendo a la trama, Fairy Tail ha vuelto a caer en viejas costumbres que, si bien a algunos les gustan, a otros les espantan. La primera parte de la película es pura y meramente fanservice, a tal punto que hay escenas que resultan hasta grotescas de ver. Como mujer, es inevitable sentirse ofendida con el trato que recibe, en especial, el personaje de Lucy, cuyo rol ha quedado reducido a perder ropa y tener unas tetas más grandes que su cabeza. En la segunda parte, en cambio, donde se podría decir que la cinta entra de lleno en la historia, el espectador asiste a una serie de acontecimientos precipitados y mayormente carentes de sentido que, si bien resultan entretenidos de ver, te dejan con la sensación de no haber comprendido del todo qué es lo que se acaba de ver.
La película fue vendida como una historia nueva, pero que conectaba con la del manga. Grave error pensar que podrían ofrecer algo que complementara a la historia original. Hay que esperar a que acabe la película y al final de los créditos para poder ver una escena final que, efectivamente, está relacionada con, nada más y nada menos, que el último arco del manga. Si bien es cierto que en un primer momento puede dejar con la boca abierta tal sorpresa, unos segundos después la emoción que sentí se desvaneció por completo para dar paso al disgusto, porque la escena en sí no cuenta nada ni está conectada con nada.
En cuanto a la historia en sí, esta es muy precipitada. El equipo Natsu se dedica a saltar de una a otra escena sin razón aparente. Para entender mejor por qué todo en esta película resulta extraño y nada natural se puede tomar como ejemplo una breve secuencia del filme que no supone un mayor spoiler para aquellos que aún no hayan visto la película. En un punto de la historia, todos se separan. Cuando Natsu vuelve en sí, decide ir a buscar a sus compañeros. Y dicho y hecho. En la siguiente escena ya está con ellos, sin explicación alguna de cómo todos se volvieron a encontrar.
Otra pega de la película son los personajes. Quienes sigan el anime o lean el manga de Fairy Tail conocen a los protagonistas de sobra. Sin embargo, habría resultado una historia mucho más interesante si alguno de ellos hubiera ofrecido algo nuevo. Hemos visto de ellos más de lo mismo. Este apunte también se podría decir de los villanos. No tienen un papel relevante en la trama, sus poderes tampoco son interesantes y es más, ni siquiera soy capaz de recordar sus nombres. Podrían haberlos omitido y la historia habría seguido siendo la misma.
Animación que no está a la altura
A-1 Pictures nos tiene acostumbrados, en general, a darnos una de cal y otra de arena en términos de animación con sus series (Your lie in April, AnoHana o la reciente Wotaku ni Koi wa Muzukashii). Teniendo en cuenta que Fairy Tail: Dragon Cry es una película que se estrenó en cines, éste es, posiblemente, uno de los peores trabajos de la productora. Porque, insisto, una cosa es una película y otra muy distinta es un episodio más de una serie de televisión. Da la impresión de que no se ha puesto esfuerzo alguno tanto en las escenas de lucha como en los movimientos durante las mismas. No hay ni una sola escena de acción que sea decente.
Lo único bueno que se puede resaltar del apartado técnico es la música. Si por algo ha destacado siempre Fairy Tail es por su banda sonora y, afortunadamente, en esta película no decepciona. Se han compuesto nuevas piezas, pero dentro del estilo al que ya estamos acostumbrados en la serie. También se ha rescatado alguna que otra joyita del anime que ya casi tenía olvidada.
Mashima haciendo de las suyas
A principios de 2017 se daba la noticia de que Fairy Tail contaría con una nueva película. A lo largo de las semanas se fue desvelando información de la misma, siendo la más destacable que, si bien se trataba de una historia completamente original, el propio Hiro Mashima sería el encargado de desarrollarla. No obstante, esta noticia podía ser buena o mala, dependiendo del punto de vista con el que se mirara. Para los que sean muy fans del mangaka, desde luego que estarían encantados, pero, en mi caso concreto, temía que Mashima repitiera los mismos y clamorosos errores que en su manga.
Uno de los principales problemas de Hiro Mashima es su narrativa. Es capaz de crear ideas que suenan bien al principio, pero después las desarrollar de manera estrepitosa. Tras visionar un par de veces la película, todavía no me he enterado de si el personaje de Sonya fue enviado desde el futuro o si simplemente lo han mantenido con vida con un dragón en su interior por más de 400 años. En mi opinión, Mashima escribió claramente esta historia con la misma mentalidad con la que escribió el arco final del manga (y que estaba ya por acabar en aquel entonces). Los antagonistas no suponen ni una mínima amenaza para los protagonistas y Fairy Tail no deja de rezumar amistad por todos lados.
En cuanto al staff de la película, A-1 Pictures se encargó de animarla, igual que lo hace con la serie de televisión. Tatsuma Minamikawa digirió la cinta, mientras que Shōji Yonemura fue el encargado de guionizar las ideas de Mashima. La película se estrenó en Japón el 6 de mayo de 2017. Para verla en España, tuvimos que esperar hasta el 1 de marzo de 2018.
La edición
Selecta Visión nos trae una edición en DVD sencilla. Desde el 14 de marzo es posible hacerse con ella tanto en tiendas como a través de la web de la distribuidora a un precio más que asequible de 12,99 €.
La película se encuentra en formato 16:9 y puede verse tanto en versión original con subtítulos en castellano y portugués como doblada al español. No obstante, preferí decantarme por la primera, porque las voces de los personajes en el doblaje al castellano no me terminan de convencer.
Conclusión
Es imposible negar que la película de Fairy Tail: Dragon Cry no sea entretenida. Sin embargo, resulta entretenida solo si el espectador no se cuestiona cómo o por qué suceden las cosas. Para los auténticos fans de Fairy Tail será una gozada, pero nadie más aparte de ellos estará satisfecho tras verla.
Lo mejor
- La banda sonora
- La escena post créditos puede emocionar a más de un fan, especialmente si han leído el manga
Lo peor
- La cantidad ingente de ecchi
- Una trama demasiado precipitada
Staff
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