Continuamos una semana más con la review del tercer capítulo del anime Orange, basado en el manga homónimo de Ichigo Takano. Este anime pertenece a la temporada de verano y retrata la vida adolescente de Naho, quien recibe una misteriosa carta de su “yo” del futuro. Avisamos que puede contener spoilers.
El capítulo comienza con la carta en la que se dice que Kakeru dejará temporalmente el club de fútbol pero “quiero que lo obligues a entrar al club porque en realidad quiere hacerlo”, reza la carta del 1 de mayo. Este día Naho toma la decisión de cambiar el futuro. Pero parece ser que Kakeru ya se ha unido ¿Ha cambiado ya el futuro?
Mientras luce contenta todo el día, Naho piensa en lo que puede hacer y cómo lo hará, Kakeru le da con un libro en la frente, indicando el punto a la realidad cuando ve pasar a Ueda-senpai, estudiante más mayor de la escuela que también va a ver los partidos del club de fútbol. Aquí el anime le da más importancia a la relación de Ueda y Kakeru que aparece en el manga.
De hecho, en la carta del 2 de mayo se anuncia que Ueda se declarará a Kakeru durante el recreo. Pero la mañana llega, Naho llama por teléfono a Kakeru para despertarlo y va sucediendo el día con sus preocupaciones. Momento clave cuando Kakeru le pregunta a Naho: “¿Hay alguien que te guste?”, y entran en ese momento de “No”,”¿Y a ti?”, “A mí tampoco”. Totalmente recuerdo de la adolescencia o de cómo imaginamos que sería ese momento. Naho le preguntará por Ueda y este dirá: “me gusta su rostro”.
La escena cambiará a jugar a “piedra, papel o tijeras” para ir a por los refrescos durante el descanso. Un momento que en el manga es mucho más gracioso sin lugar a dudas. Pero el anime pasa a ese momento en el que Ueda se declara y Kakeru le comenta a sus amigos que le ha dicho que le dirá algo después del puente.
Seguimos sin ver muchos cambios de actitud en los personajes, sólo que han afianzado más su amistad. Tal es así que Naho se encuentra un mensaje en la goma que le había prestado a Kakeru:“¿Crees que debería salir con Ueda?” y le escribe en respuesta una carta que le deja en la taquilla ¿Hasta qué punto podemos dejar que alguien nos guíe? Aunque su “yo” futuro le dice que le diga lo que piense, Kakeru le dice que sí a Ueda. La cara de decepción de Naho es la misma que se nos quedaría a cualquiera en su lugar. Esa es la magia de esta obra, es muy fácil entrar en el rol de los protagonistas.
Suwa será quien le diga la verdad que Naho siente, que está enamorada. Ella le mira llorando y sale corriendo, mientras que en un cambio de escena, Kakeru mira la respuesta de Naho a su pregunta, un “no” bien grande.
El pasado termina con Naho bebiéndose el zumo de naranja que Kakeru le había comprado. Un sabor “agridulce”.
El flashforward de este capítulo aparece con la cápsula del tiempo que es como comienza el capítulo del manga. Una cápsula en la que había cartas para su futuro “yo”, pero Kakeru fue el único que no lo hizo, sino que era una carta dirigida a los demás. Quizás él ya conocía su futuro y su muerte no fue un accidente.
El contenido del capítulo continúa en general siendo la fiel adaptación del mismo capítulo del manga. Veremos cómo se las ingenian los guionistas para condensar el resto de la historia en los episodios que restan. Pero, sin duda, estamos ante uno de los anime destacados de la temporada de verano.
¿Podrá Naho salvar a Kakeru esta vez?
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