Bienvenidos a las impresiones de un nuevo capítulo de la serie animada de One Piece. En esta ocasión analizamos el episodio número 780, estrenado en la televisión japonesa el pasado 25 de marzo. Seguimos recordando que este artículo puede contener spoilers.
En este capítulo, titulado “Un frente hambriento ¡Luffy y los novatos de la Marina! ”, el grupo de Luffy sigue su rumbo hacia Big Mom con un hambre terrible, ya que su capitán ha vaciado la dispensa del barco al intentar cocinar algo él mismo.
Ante estas condiciones surge un rayo de luz, Pedro avista una isla en el horizonte y deciden poner rumbo hacia allí, pero Pekoms les avisa de que se trata de una base de la Marina. No se trata de una base más, sino una base donde se reúnen las tropas más temibles de la armada. Entre esta tan temible flota se encuentra un novato tras trasladarse allí tras dejar de servir a Garp; el abuelo de Luffy.
A pesar de todo, Brook, Luffy, Nami, Chopper y Carrot deciden desembarcar en la isla haciendo uso del submarino del barco e infiltrarse en ella uniformados con los uniformes de la marina, tras robarselos a unos incautos soldados . Tras un rato buscando comida, los marines que andan por el bosque de la isla encuentran a sus compañeros sin ropa, avisando así de que alguien se ha infiltrado. Finalmente, el almirante del cuartel encuentra a Luffy y avisa a toda la base poniendo todas las miras en nuestro héroe.
Como ya comentamos en las impresiones del anterior episodio, estamos en un arco de relleno, que seguramente dure 3 o 4 episodios como suele ocurrir en estos casos. Habrá que estar expectantes a la saga de “Big Mom”, la cual se está haciendo un poco de rogar, ya que parece ser que el manga necesita avanzar un poco más con respecto a su versión animada. Aun así estamos ante un capítulo divertido y ameno.
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