En el último episodio de Citrus, publicado el 24 de febrero de 2018 la situación sentimental que sufre nuestra protagonista sigue enrevesándose con una cita a dos bandas entre la co-protagonista y el personaje que se introdujo en el anterior episodio. Al igual que en las anteriores reviews de esta sección, recordamos que las siguientes líneas contienen spoilers y aspectos del episodio emitido, por lo que se recomienda verlo con anterioridad.
El argumento de este capítulo se centra en una cita entre Matsuri y Yuzu a la que acudirá también su hermana menor, lo que creará una mayor tensión entre los personajes y la apertura de diferentes frentes para la protagonista.
A pesar de ser la oportunidad perfecta para Matsuri de acercarse a su amiga del pasado, Yuzu centra toda su atención, incluso inconscientemente, en Mei lo que provoca que ésta se sienta decepcionada y celosa. De esta forma, y tras no conseguir las expectativas que tenía de la cita, la pelirrosa ofuscada ataca a Yuzu, recordándole que lo que tiene con Mei es una simple amistad que no tendrá futuro. Ante esta situación, Matsuri vuelve a declarar sus sentimientos, los cuales ha mantenido en secreto por mucho tiempo, pero recibe un condescendiente rechazo que hace que huya dejándola sola.El enfado de Matsuri se intensifica y decide descargar su furia en una máquina recreativa en la que tras reflexionar sobre lo sucedido elabora un plan para dejar mal a Mei frente a Yuzu, que se producirá con la ayuda obligada de dos niños que observaban de forma indecente a Matsuri. En este momento da comienzo la verdadera Guerra de Hermanas Menores con el encuentro de Matsuri y Mei en el aparcamiento donde se lleva a cabo dicho plan, mientras Yuzu busca a su amiga por todo el centro comercial.
El plan de Matsuri se basaba en hacer enfadar a Mei profiriendo frases hirientes además de insultos directos y que de esta manera Mei arremetiera contra ella golpeándola. Para sorpresa de todos los espectadores y de la propia instigadora esta chica decide robarle un beso a Matsuri, alegando que de esta forma le arrebata el beso que en días anteriores le dió a Yuzu en los semáforos.
Esto se traduce en un giro de los acontecimientos algo inesperado aunque comprensible debido a que parece que Mei soluciona todos sus problemas con besos. Tal vez como consecuencia de que es una de las pocas formas que ha conocido para resolver o hacer más llevaderos sus dificultades.Tras esta situación Matsuri verifica que sus cómplices hayan tomado una fotografía de lo sucedido y satisfecha decide irse a casa sola mientras las hermanas tienen que volver andando debido a la nieve. Por el camino, Mei habla de su necesidad de mantener a personas cálidas a su alrededor para compensar que es una persona fría y retorcida. Ante esto, Yuzu la reconforta y trata de hacerle sentir mejor.
Durante esta conversación se induce a mencionar futuros acontecimientos que plasmará el anime en episodios como la fiesta de Navidad, donde Mei disfrutará de unas verdaderas navidades en familia, o el futuro viaje escolar que se realiza en febrero.El final del episodio cierra con Mei adelantando trabajo del Consejo para llegar temprano a casa el día de Navidad, cuando es interceptada por Matsuri que no piensa dejar que su relación con Yuzu avance en estas vacaciones. En conclusión, en este episodio Matsuri ha obtenido un arma contra el que poder contraatacar el avance que Mei tiene sobre Yuzu.
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