La gata es famosa porque ha conseguido revitalizar la economía local gracias a todo el turismo que atrae a la estación. Se calcula que cada año más de 20.000 turistas asiáticos visitan Kishi sólo para conocer a Tama. Los habitantes de la ciudad están tan agradecidos que incluso le han dedicado un tren: el Tamadensha. En 2008 la gata obtuvo, además, una condecoración del gobierno de Wakayama por contribuir a la economía local con 1.100 millones de yenes (8,49 millones de euros).
La historia de Tama comienza en abril de 2006, cuando la Wakayama Electric Railway eliminó a los conductores de los trenes de la línea de Kishigawa para reducir costes. Los trenes se empezaron a controlar de manera remota y se nombró a los jefes de estación entre los empleados de las empresas locales cercanas a cada estación. Para la estación Kishi se seleccionó a Toshiko Koyama, vendedora del barrio.
Koyama había adoptado a Tama y a otros gatos callejeros, dándoles de comer en la estación. En enero de 2007, los funcionarios del ferrocarril decidieron nombrar oficialmente a Tama como jefe de estación y hacerle entrega del sombrero que va con el puesto. Su deber principal es saludar a los pasajeros y, en lugar de un salario, la compañía le paga con comida para gatos. Sin embargo, debido a la avanzada edad de Tama, que en años humanos equivaldría a 80 años, ya tiene un sustituto de su misma especie: Nitama, que traducido al español quiere decir Tama número dos.
Fuente: International Press Digital
Facebook
Twitter
Pinterest
Instagram
YouTube
RSS