Tres años tras Pluto
Tres años han pasado desde Planeta DeAgostini anunciara que publicaría en España Pluto, la última genialidad de un autor, Naoki Urasawa, el cuál, tras Monster y 20th Century Boys, vuelve a ofrecernos una obra seinen que nos mantendrá en vilo del primer al último volumen.
Corría el año 2006, andábamos aún disfrutando de la versión animada de Monster y el tramo final de 20th Century Boys, cuando Planeta DeAgostini nos sorprendió a todos con el anuncio de que poseía los derechos de la última maravilla de Naoki Urasawa, Pluto, un manga que rendía homenaje al dios del manga, Osamu Tezuka, y a una de sus obras más conocidas, Astroboy.
Desde entonces, Pluto ha suscitado una de las preguntas más repetidas en la sección de consultas de Planeta DeAgostini, en sus presentaciones de novedades en salones, y allí donde apareciera algún responsable de Planeta DeAgostini Comics… «¿Para cuándo editaréis Pluto?».
Salón tras salón Pluto salía como posible novedad, pero siempre era atrasado, o cancelado en el último momento. Las razones esgrimidas por la editorial era que las negociaciones estaban siendo muy duras y siempre había flecos que retrasaban el estreno de Pluto en España.
Finalmente en el pasado XXVII Salón del Cómic de Barcelona, Ignaçi, responsable de la línea manga presentaba Pluto en la sala de actos con una amplia sonrisas y la satisfacción de que, aunque se había hecho esperar mucho mucho, pero que al fin Pluto estaba en España.
Un homenaje al más grande
Pluto se empezó a editar en Japón en el año 2003, año en el que fechó Osamu Tezuka el nacimiento del niño robot más famoso de la industria del cómic, Astroboy (Atom). Ese año Tezuka Productions andaba trabajando en las celebraciones de este especial aniversario de Astroboy, cuando se personó en sus oficinas Naoki Urasawa, acompañado de un productor y su editor en la editorial Shogakukan. El autor de Monster y 20th Century Boys se presentó ante Takamasa Matsutani, director de Tezuka Productions, con el interesante proyecto de realizar un manga basado en una de las historias más conocidas de Testuwan Atom (Astroboy), a modo de homenaje a la obra de Osamu Tezuka, su ídolo.
Takamasa que no se lo pensó mucho, lo que más le gustó de la idea es que no se trataba de una revisión del clásico, sino una nueva visión de la historia con un protagonista diferente, Gesicht, un investigador de la Europol. El proyecto gustó tanto que se quería cuidar con mimo, y hasta el propio hijo mayor de Tezuka, Makoto Tezuka se vinculó al proyecto como supervisor de la historia.
Pluto comenzó a serializarse en la Big Comic Original en septiembre del 2003 y se alargó el 5 de abril del presente año, acumulando un total de 8 tomos. Pluto a la póster, aunque no sorprendiera mucho, resultó ser un nuevo éxito de Urasawa, que en el 2005 se vio recompensado con el premio a la excelencia en el Japan Media Arts Festival, y el gran premio Tezuka Osamu Cultural, premio que conseguía por segunda vez tras recibir uno por Monster.
El mejor robot sobre la faz de la Tierra
Como ya hemos comentado Pluto se basa en una historia incluida en el manga de Osamu Tezuka Astroboy (Tetsuwan Atom), concretamente la titulada «El mejor robot sobre la faz de la Tierra» (Tomo 3 de la edición de Astroboy de Ediciones Glénat). En dicha historia original, Pluto (Plutón en la edición de Ed. Glénat) es un robot gigante creado con la misión de ser, y demostrar, que es el robot más poderoso sobre la faz de la tierra, para lo cuál tiene que ir derrotando a todos y cada uno de los robots más poderosos del planeta, entre los que se encuentra Astroboy. En dicha historia, el protagonista es el niño robot. Aquí es donde radica el principal cambio de Pluto respecto a la historia historia original de Osamu Tezuka, en la que el protagonista es Gesicht, un policía de la Europol.
La historia da comienzo como en el original, con el asesinato de un robot querido por todos, llamado Montblanc, de la zona de Lucerna en Suiza, que hacía labores de guarda forestal, ayudando a conservar la naturaleza de la zona y a toda persona que se perdía en la montaña. En Pluto el cuerpo Montblanc es descubierto tras sofocar un intenso incendio en el bosque, pero de él solo queda su cabeza, a la cuál han clavado dos ramas a modo de cuernos.
Aquí es cuando se nos presenta Geischt, un policía que comenzará a investigar el asesinato, cuyo personaje que está basado también en la historia original, aunque no desvelaremos en cuál, para que así, lo descubráis por vosotros mismos. Las primeras hipótesis apuntan a que otro robot es el causante, puesto que Montblanc destacaba por ser uno de los robots más fuertes del planeta.
A este asesinato, le sigue uno que descoloca a Geischt, el de un miembro ejecutivo de una protectora de la ley robótica, Bernard Ranke, y además en circunstancias similares, ya que su cuerpo es encontrado con una especie de cuernos clavados en su cabeza. El hecho es que un robot nunca podría hacer daño a otro humano, debido a la primera ley de la robótica «…un robot nunca podrá dañar a un ser humano por obra u omisión…» (Imperio y Robot).
De Osamu Tezuka, pasado por Isaac Asímov, llegamos a Pluto
A partir de entonces arranca verdaderamente la historia de Pluto, un thriller en un futuro próximo donde humanos y robots conviven en armonía. Naoki Urasawa nos presenta una sociedad heredada de las las novelas del padre de la robótica moderna Isaac Asimov, donde los robots tienen personalidad, trabajo, pareja…. una vida, como la de cualquier humano.
La historia sigue de cerca el original de Osamu Tezuka, pero además incorpora muchas de las preguntas y cuestiones que Isaac Assimov desarrolla en sus obras, como la relación paternalista y guardiana de los robots con los humanos, y sobre todo, la teoría de si una inteligencia artificial puede soñar.
El ritmo narrativo de Pluto sigue la línea establecida por su autor en sus anteriores obras, concretamente Monster y 20th Century Boys. La historia sigue un ritmo lento pero constante desvelando cabos a medida que ata otros. Uno de los recursos que más llaman la atención en Naoki Urasawa la primera vez que te acercas a una de sus obras es los saltos entre personajes que realiza entre capítulos. Es decir, podemos estar leyendo dos capítulos donde es Geischt el protagonista, para luego encontrarnos dos capítulos en los que la acción se traslada a otra punta del globo en la que los personajes parecen guardar poca relación en principio con la historia. Poco a poco Urasawa va colando estos capítulos entremezclados con el desarrollo de la trama central como piezas de un puzzle, que finalmente acaban encajando al ir cerrando cabos.
Dicho esto podríamos decir que aunque Pluto está basada en una historia clásica del Astroboy de Tezuka, Urasawa lo lleva más allá aplicando su maestría con thrillers y aplicando muchas de las cuestiones que planteó Isaac Asímov en libros como Yo Robot, Robots e Imperio o El hombre bicentenario.
Los robots de Tezuka en manos de Urasawa
Naoki Urasawa no sorprende con si dibujo en Pluto, sigue manteniendo el nivel al que nos acostumbró en 20th Century Boys, su obra anterior. No esperemos que vayamos a encontrarnos en Pluto ciudades e ingenios mecánicos increíbles sacadas de Blade Runner o Yo Robot. Urasawa tiene la maestría de hacer creíble lo increíble y en Pluto vuelve a presentarnos un futuro mucho más cercano a la era actual de lo que imaginaban las novelas del siglo pasado.
Lo que si hay que destacar de Urasawa en Pluto es la labor de caracterización de los distintos personajes sacados de Astroboy. Desde Montblanc, la primera víctima hasta Gesicht o North2, son perfectamente reconocibles, respecto al diseño original de Tezuka, demostrando una increíble capacidad de diseño de personajes, en especial los robots, que hasta ahora no le habíamos visto a Urasawa.
Urasawa el genio del thriller
Naoki Urasawa nació en Fuchu, Tokio (Japón) en 1960. Se licenció en Ciencias económicas en la Universidad Meisei. Debuta de forma profesional en el mundo del manga con Beta!! (1983-93), una obra de un sólo tomo en tono de humor. Su primer gran éxito llego en 1986 con Yawara!!, conocida aquí como Cinturó Negre, cuya versión animada gozó de mucha popularidad en Cataluña, hecho que sirvió para que, hace poco más de un mes, Ediciones Glénat comenzara su publicación en catalán.
Tras Yawara!! vinieron Pineapple Army (1986-88), editada en parte en España en la primera época del manga en nuestro país; Dancing Policeman (1987); Master Keaton (1988-94), que fue su segundo éxito y que gozó de una adaptación animada;Nasa (1988) y Happy! (1993-99).
En 1994, tras terminar Master Keaton llegó Monster (1994-2001), obra que consagró a Naoki Urasawa de forma internacional, y le dio la relevancia fuera, que ya tenía en Japón, como un gran artistas del cómic contemporáneo.
En el reciente XXVII Salón del Cómic, un figura ilustre del cómic español que ahora mismo trabaja para una editorial, que no es Planeta DeAgostini, llegó a comentarnos «…si alguien no ha leído Monster es que no ha leído comics…».
Monster le dio el poder a Naoki Urasawa de poder tener una libertad mayor a la hora de crear, y así nació 20th Century Boys (1999-2007), una obra que también quedará para la historia del mundo del cómic.
Cuando aún andaba terminando 20th Century Boys nació el proyecto de Pluto, el manga que hoy reseñamos, y que le ha llevado hasta principios del 2009, con 8 tomos publicados.
Actualmente está trabajando en Billy Bat, desde Octubre del 2008, serializándolo en la Morning Magazine de Kodansha, con una historia de súper héroes ambientada en los años 40, en la que el protagonista recuerda bastante al murciélago enmascarado.
La Edición
Planeta DeAgostini lleva unos meses sorprendiendo a propios a extraños con unas ediciones muy por encima de lo que solían sacar al mercado. En palabras del propio Ignaçi, editor de la línea manga de la editorial, ahora mismo están cuidado mucho sus ediciones, en la actual época de crisis, prefieren sacar menos obras, pero más cuidadas y atractivas para el lector.
Pluto nos llega a un precio de 7.95€ con sobrecubiertas, portadas y páginas a color en un formato similar al de otras obras de la línea Pachinco (18x13cm), con casi 200 páginas. La calidad del papel, sin ser ninguna maravilla, es superior a otras obras de la linea Pachinco anteriores, concretamente, sin irnos más lejos, a los 2 tomos de 21st Century Boys.
Se incluye al final un curioso epílogo, un texto del presidente de Tezuka Productions hablando de los originales de Pluto, de como surgió la idea, y de ciertos paralelismos de Naoki Urasawa con Osamu Tezuka.
Como curiosidad final, una muestra más de la dificultad de negociación una licencia como ésta, es la portada donde podemos ver todas las personas responsables del proyecto, y por consiguiente, que había que poner de acuerdo para sacar el manga en nuestro país.
Conclusión
¿Has disfrutado con Monster y 20th Century Boys? Si es así la respuesta es obvia, si no tienes el primer tomo de Pluto ya entre tus manos, es que estás tardando. Tanto narrativamente, como artísticamente, esta obra vuelve a ser un megahit de Naoki Urasawa que volverá engancharte de la primera a la última página… y que última página.
Naoki Urasawa es un maestro manejando el suspense, y los cliffhangers. Es capaz de estar contándote algo de forma tranquila, para que cuando te acercas al final de un capítulo darte una sorpresa de quedarte con la boca abierta. Algo que muchos adoramos en este autor.
Además, con Pluto se rinde homenaje a una de las historias más famosas de uno de los cómics más famosos de Osamu Tezuka.
Lo Mejor: Naoki Urasawa en estado puro, homenajeando al más grande. ¿qué más se puede pedir?
Lo Peor: Que la historia en ciertos aspectos nos guarde pocas sorpresas a priori, ya que es una historia ya conocida.
Fecha técnica:
Título original: Pluto
Guión: Naoki Urasawa, basado en el original de Osamu Tezuka
Dibujo: Naoki Urasawa
Editorial japonesa: Shogakukan
Editorial española: Planeta DeAgostini
Formato: Tomo (18x13cm) con sobrecubierta mate, 200pág. B/N y color.
Precio: 7.95€
Nº de tomos en japonés: 8 Tomos (cerrada)
Nº de tomos en castellano: 8 Tomos (1 tomo en el momento de hacer ésta reseña)
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